La primera es la mas obvia, en cuanto a infraestructura los Venezolanos nos llevan varios años de ventaja. Con carreteras, puentes y demás obras construidas hace ya varias décadas uno puede ver el país prospero que fueron y que pensaron siempre en grande, siempre en crecer, nunca en lo pequeño.
Claro, como dije, son obras que vienen desde muchos años atrás y algunas incluso ya empiezan a verse deterioradas.
Otra cosa que me impresionó fue que me dijeron que había escasez en Venezuela y sinceramente no lo vi por ninguna parte, ni en Maracaibo, ni en la península de Paraguana, donde el hotel en el que me encontraba estaba lleno de turistas que llenaban todo el tiempo el centro comercial que tenía al lado y playas hermosas, ni en cualquiera de los supermercados a los que fui, donde siempre los vi bien surtidos de todo lo que quisiera comprar.
Pero lo que mas me impresionó fue ver que Venezuela es como dicen los gringos: One man show
Si, es el espectáculo de Hugo Chavez, un solo hombre que está presente en todos lados. Desde que uno entra empieza a ver inmensas vallas de la campaña presidencial mostrando a un Chavez sonriente y de puño en alto, frente a unos insignificantes avisos de su contendor Capriles, cuyo presupuesto seguramente es inferior al de toda la maquinaria gubernamental, que no contenta con eso exhibe al coronel en todos lados, en cualquier lugar, donde uno menos se imagina.
Y es que en Venezuela no hay obra del gobierno que no tenga alguna frase referente a la "revolución bolivariana" y una foto de Chavez, desde la escuelita mas pobre, hasta el centro de salud mas grande, está por tantos lados que pareciera que poner vallas para su reelección es botar dinero, pero es así, absolutamente todo en Venezuela pareciera que se lo deben a Chavez y que el mismo lo ha construido, porque no existe una figura detrás de el, porque el lo es todo y pareciera que sin el no habría nada, al mejor estilo de las pesadillas futuristas como 1984.
Entonces pregunté.
La persona que nos acompañó en todo el viaje es un Colombiano que tiene mas de 20 años viviendo en Venezuela y conoce la prosperidad del antes y la decadencia del ahora, pero también con sinceridad que tampoco todo es tan grave como lo pintan. Aun hay libertades en Venezuela como para pintar a un dictador represivo, no hay esa escasez de alimentos que tantos nos dicen, la corrupción ha subido pero es que antes también la había, la inseguridad es un problema que hace rato se les salió de la mano, son una sociedad profundamente polarizada, pero hubo un detalle que fue el que mas me llamó la atención cuando pregunté por Capriles y sus posibilidades de ganar.
"Compadre, eso es pelea de tigre con burro amarrado", me contestaron.
Me contó como durante mas de una década Chavez ha calado profundamente en una parte de la población que fue olvidada, de como un tipo increíblemente sagaz y carismático para muchos da el discurso que allá muchos quieren oír, de como Capriles luce como una mansa e ingenua ovejita que se enfrenta a un lobo que se sabe todas las mañas, pero que probablemente ni necesite usarlas, porque puede ganar sin necesidad de eso.
Me contó como Chavez ha adoctrinado durante mas de una década a universidades y colegios a niños y adolescentes que han crecido con ese "One Man Show" omnipotente y omnipresente, que lo es todo, lo hace todo y está en cualquier esquina que uno mire.
Y caí en cuenta que en esa decadencia el aun dictadorcito es rey y seguirá creciendo, imposible de detener, hasta que le quitemos el diminutivo en poco tiempo.