La marcada polarización y el escenario cada vez más complejo de confrontaciones geopolíticas, ha venido a poner sobre la mesa la imperiosa necesidad de medir el tono de los discursos, de trabajar en una comunicación que acerque y que disminuya de alguna manera los conflictos entre territorios, y de manera general, entre seres humanos que piensan diferente.
En este particular escenario que lleva al ciudadano y a los líderes a sentir miedos y desesperanza ante el futuro, lo intangible se convierte en elemento esencial para lidiar con tantos desafíos. Cobran mayor relevancia los sentimientos y las percepciones, que desencadenan una serie de efectos negativos o positivos frente a las organizaciones y los gobiernos.
Lo intangible, aquello que decimos que no podemos ver o tocar, es cada vez más relevante, pues ante la incertidumbre, la información veraz y transparente, el fortalecimiento y la protección de la reputación, son elementos fundamentales para sobrevivir en tiempos de alta turbulencia.
El valor de lo intangible quedó ratificado en el reciente informe Approaching The Future, que completa 10 ediciones, siendo el informe de referencia para comprender la transformación que deben transitar las empresas que para ser verdaderamente lideradas integrando la reputación y la gestión de los intangibles en su orientación estratégica. (https://www.corporateexcellence.org/approaching-the-future)
La reputación corporativa y los riesgos reputacionales, la comunicación y el liderazgo responsable ocupan los tres primeros lugares del ranking de tendencias más importantes para trabajar hoy. Esto, no solo le sigue subiendo el volumen a la conversación sobre cuáles son las prioridades en las que poner el foco gerencial, sino que nos reitera la necesidad de desarrollar nuevas habilidades para un mundo que no se queda estático y en donde las relaciones son cambiantes.
En los últimos 10 años, hemos visto a través de Approaching The Future, el crecimiento indiscutible de la gestión de intangibles para la excelencia empresarial. Propósito corporativo, los stakeholders y su rol e influencia en la sostenibilidad organizacional, la inteligencia contextual y social, el activismo como herramienta de las marcas para hacerse más relevantes, la inteligencia artificial y la reputación y los riesgos asociados a su gestión, han sido aspectos claves que nos ayudan a entender cómo se ha ido moviendo el mundo empresarial.
El contexto mundial y el contexto de país ratifican el valor de lo intangible, y la necesidad de comprender que no se gestiona de manera improvisada y mucho menos negando su impacto en el presente y futuro de las empresas. Lo intangible es cada vez más visible y medible, estar de espaldas a ello es un grave error. Impulsar el crecimiento del capital social y relacional es un deber hoy, mantener viva y fortalecida la reputación es un must.
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