Buscarse la muerte


Seguimos viendo a las mujeres como criaturas frágiles que tienen restringido parte del mundo. Seguimos pensando que hay calles por las que no deberían cruzar, horas en las que deberían estar en sus casas, libertades que no se pueden permitir porque le son peligrosas.

Y cuando una mujer está en ese callejón oscuro, en esa hora no permitida, con esa ropa "equivocada" entonces el mundo ya no las protege porque lo que a ella le pase será su culpa, porque el pobre atracador, violador, abusador, golpeador no se puede controlar ante la infamia de verla sola, sin un hombre que la defienda, fragil y atrevida. ¿Para qué se metió en esta calle? La robo, la violo, la mato. ¿Para qué anda a estas horas de la noche? La robo, la violo, la mato. ¿Para qué se viste así? La violo, la mato, fácil. Total es su culpa, es atrevida, es loca o es bruta, se lo merece.

"Alejandro, no salgas con esa camisa abierta que te van a violar..." Una frase que nunca escucharemos porque a Alejandro no lo van a violar ni lo van a matar por ser seductor.

En Ecuador, acuchillaron a dos chicas argentinas que cometieron la infamia de viajar solas, de confiar en un desconocido y no aceptar entregar su cuerpo, eso les costó la vida. En Facebook, Guadalupe Acosta desde Paraguay escribió el texto que aquí reproduzco solo a manera de reflexión, porque sabemos que todavía falta mucho para no culpar a las víctimas de sus propias desgracias.

Ayer me mataron

Me negué a que me tocaran y con un palo me reventaron el cráneo. Me metieron una cuchillada y dejaron que muera desangrada.

Cual desperdicio me metieron a una bolsa de polietileno negro, enrollada con cinta de embalar y fui arrojada a una playa, donde horas más tarde me encontraron.

Pero peor que la muerte, fue la humillación que vino después.
Desde el momento que tuvieron mi cuerpo inerte nadie se preguntó donde estaba el hijo de puta que acabo con mis sueños, mis esperanzas, mi vida.
No, más bien empezaron a hacerme preguntas inútiles. A mi, ¿Se imaginan? una muerta, que no puede hablar, que no puede defenderse.

¿Qué ropa tenías?

¿Por qué andabas sola?

¿Cómo una mujer va a viajar sin compañía?

Te metiste en un barrio peligroso, ¿Qué esperabas?

Cuestionaron a mis padres, por darme alas, por dejar que sea independiente, como cualquier ser humano. Les dijeron que seguro andabamos drogadas y lo buscamos, que algo hicimos, que ellos deberían habernos tenido vigiladas.

Y solo muerta entendí que no, que para el mundo yo no soy igual a un hombre. Que morir fue mi culpa, que siempre va a ser. Mientras que si el titular rezaba fueron muertos dos jóvenes viajeros la gente estaría comentando sus condolencias y con su falso e hipócrita discurso de doble moral pedirían pena mayor para los asesinos.

Pero al ser mujer, se minimiza. Se vuelve menos grave, porque claro, yo me lo busqué. Haciendo lo que yo quería encontré mi merecido por no ser sumisa, por no querer quedarme en mi casa, por invertir mi propio dinero en mis sueños. Por eso y mucho más, me condenaron.

Y me apené, porque yo ya no estoy acá. Pero vos si estas. Y sos mujer. Y tenes que bancarte que te sigan restregando el mismo discurso de "hacerte respetar", de que es tu culpa que te griten que te quieran tocar/lamer/ chupar alguno de tus genitales en la calle por llevar un short con 40 grados de calor, de que vos si viajas sola sos una "loca" y muy seguramente si te paso algo, si pisotearon tus derechos, vos te lo buscaste.

Te pido que por mí y por todas las mujeres a quienes nos callaron, nos silenciaron, nos cagaron la vida y los sueños, levantes la voz. Vamos a pelear, yo a tu lado, en espíritu, y te prometo que un día vamos a ser tantas, que no existirán la cantidad de bolsas suficientes para callarnos a todas.

https://www.facebook.com/guadalupe.acosta.58/posts/10207451024425690


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