La Cultura Ciudadana en la Agenda


Hace unos días reflexioné  sobre las ideas de Yuval Noah Harari, quien es considerado uno de los intelectuales más influyentes en la actualidad. Harari, además de historiador y filósofo, es el autor de obras como "Sapiens: Breve historia de la humanidad," "Homo Deus: Breve historia del mañana" y "21 lecciones para el siglo XXI". En su libro "Sapiens," Harari define la cultura como un componente esencial para la comprensión mutua entre las personas y para la construcción de la sociedad desde los albores de la civilización.

De acuerdo con esta perspectiva, la cultura es el entorno que las sociedades creamos para facilitar una mejor coordinación en nuestra colaboración y sostenibilidad. Es un medio para entender el mundo a través de la experimentación y el intercambio de ideas y experiencias con otros. En este sentido, contribuye al desarrollo humano al fomentar una mayor conexión entre las personas y al promover valores compartidos que fortalecen la cooperación y el bienestar común.

Un informe reciente del Banco Interamericano de Desarrollo titulado "CONFIANZA: La clave de la cohesión social y el crecimiento en América Latina y el Caribe" señala que la región de América Latina y el Caribe presenta los niveles más bajos de confianza interpersonal y en los gobiernos a nivel mundial. El equipo del BID argumenta que la desconfianza y las débiles relaciones ciudadanas afectan directamente el crecimiento económico, el desarrollo social y la alta desigualdad que enfrenta la región. Entre 1980 y 2020, la tasa promedio de crecimiento per cápita del PIB real en América Latina y el Caribe estuvo por debajo del promedio mundial.

El concepto de "Cultura Ciudadana" fue acuñado por Antanas Mockus durante su primera alcaldía en Bogotá en 1995, en donde define la Cultura Ciudadana como una estrategia que busca cambiar hábitos relacionados con la convivencia y el cumplimiento de normas urbanas a través de la autorregulación personal y la regulación mutua entre los ciudadanos. Mediante esta estrategia, Bogotá logró reducir los conflictos, los homicidios, los incidentes viales y otros comportamientos relacionados con la convivencia y la confianza social. Posteriormente, ciudades como Cali, Medellín, Cartagena, Barranquilla y Bucaramanga implementaron programas similares para fomentar la confianza, el cumplimiento de normas y la convivencia en sus comunidades.

En el caso de Cartagena, la Encuesta de Percepción Ciudadana de 2022 del programa "Cartagena Cómo Vamos" refleja un alto grado de pesimismo. Un 79% de los habitantes de la ciudad considera que las cosas van por mal camino. Asimismo, el orgullo por Cartagena se encuentra dividido, con un 38% de los cartageneros afirmando sentirse orgullosos de su ciudad y otro 36% mostrando poco orgullo. Además, las Encuestas de Cultura Ciudadana 2020, 2021 y 2022, muestran altos niveles de desconfianza entre los cartageneros y las instituciones públicas.

En consecuencia, el futuro gobierno enfrentará el desafío de incluir programas y estrategias de cultura ciudadana en sus planes de desarrollo, para movilizar el capital humano de la ciudadanía hacia el cuidado, la confianza y el desarrollo.

Juan José González Pérez

Economista

Aliado Académico Laboratorio Cultura Ciudadana de Cartagena -LAB3C

 


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