En algún lugar...


Creo que ya es hora de aceptarlo. Me gustan las películas de Sofía Coppola aunque las sufra y sienta mientras las veo que la monotonía puede materializarse y congelar todo mi entorno.

[inline:2590331195_6daefcb80a.jpg]
Desde Vírgenes suicidas (1999), una hermosa y desgarradora historia ambientada a principio de los setentas sobre el caso real de cinco hermanas adolescentes que se suicidan sin aparente motivación.
Siguiendo con Lost in traslation (2003) sobre… Es la hora y no sé de qué trata la película, ¿de la crisis de mediana de edad de Bill Murray?, un actor en decadencia; ¿Del aburrimiento de Scarlett Johansson? Una joven casada con un músico que pasa más tiempo del que quisiera sola en un hotel; ¿De las diferencias culturales entre Tokio y Estados Unidos?... Ni idea.
[inline:lostintranslation.jpg]
Pasando por María Antonieta (2006), la recreación pop endulzada e hipercolorida de la reina odiada por los franceses y decapitada por sus supuestos excesos durante la revolución que terminó con la monarquía.
[inline:María Antonieta (1).jpg]
Hasta Somewhere (2010), su última película presentada en el FICCI, protagonizada por Stephen Dorff y Elle Fanning, donde muestra la vida de fiestas, lujos y sexo fácil de un actor de Hollywood y la relación con su hija de 11 años.
Otra vez el tedio, otra vez la ausencia de música, otra vez las largas escenas en las que aparentemente no pasa nada. Aun así, algo de esas películas se queda en mí, algo las hace perdurables.
[inline:somewhere-sofia-coppola-4.jpg]
En esos ambientes monótonos los personajes se transforman lenta e imperceptiblemente, sin golpes de suerte, sin monumentales revelaciones, sin accidentes que les cambien la vida a la fuerza sólo con los sucesos insignificantes del día a día que se acumulan hasta volverse una pesada carga que fuerza el cambio.
La soledad (y la melancolía que siempre llega de su mano), son los temas predominantes en las películas de Sofía Coppola.
Sin ser pretenciosa, sin crear tramas psicológicas complicadas que pretenden ser profundas, Sofía se mete (y mete al espectador) en el inconsciente de los personajes, se pueden sentir sus frustraciones, su apatía, la falta de motivación y experimentar el momento en que están al borde de un precipicio emocional, el punto de quiebre que es como una liberación y, usualmente, la resolución de la historia.
En Somewhere (en español le dieron el cursi título En algún lugar del corazón), Johnny Marco (Stephen Dorff) es un actor taquillero, con dinero y comodidades, vive su éxito pero no parece disfrutarlo, se ve obligado a cambiar su estilo de vida cuando tiene que cuidar a su hija.
Dorff es simplemente un actor interpretando a un actor, la verdadera sorpresa es Elle Fanning, tiene las mismas cualidades de su hermana Dakota Fanning: una capacidad increíble para transmitir madurez con la suficiente sensibilidad e inocencia de una niña. La actuación le sale natural.
[inline:Somewhere1_MAIN.jpg]
Somewhere es una linda historia sobre el descubrimiento del amor incondicional entre padres e hijos que no en todas las familias ni en todos los casos sigue el curso natural. Marco tiene que verse enfrentado a pasar más tiempo con la niña para darse cuenta del vacío que hay en su vida, el éxito, en cualquiera de sus facetas, encandila pero no siempre significa satisfacción personal.


TAMBIEN TE PUEDE GUSTAR