En el marco de ese "racismo sutil" que se padece en Cartagena, cuando tradicionalmente una persona de piel oscura y extracción humilde desea salir adelante y ascender social y económicamente se le menosprecia con la frase: "El mono aunque se vista de seda mono se queda". La misma que usted ha utilizado para rechazar la idoneidad de la candidatura de Campo Elías Terán Dix.
En mi opinión, endilgarle la frase "El mono aunque se vista de seda mono se queda", es de un racismo y un clasismo tan descarado y tan denigrante, que creo que le debe usted una disculpa no solo al señor Terán sino también a todos los afrodescendientes y en general a toda la gente sensible y decente de la ciudad.
Si usted considera que el señor Terán no merece dirigir los destinos de la ciudad, pues perfecto, esta en su derecho de expresarlo. Pero no se justifica que una mujer tan valiosa como lo es usted, de su extraordinaria preparación e inteligencia, apelar a calificativos vergonzosos que ya es hora vayamos eliminando de nuestro lenguaje cotidiano.
Vale aclarar que personalmente no apoyo ni esta ni ninguna otra candidatura, pero pienso que cualquier debate sano debe darse exclusivamente en el campo de las ideas. Algo de lo cual la actual contienda electoral carece por completo. Y los columnistas de opinión (por desgracia) no están aportando mucho tampoco, mas allá de la calumnia y la descalificación personal. La que pierde, como siempre, es la ciudad. Pobre Cartagena.