Rosacea
La rosácea es una enfermedad crónica que afecta la piel y en ocasiones los ojos. Años atrás se consideraba como una forma de acné, de tal manera que en libros y en el argot médico se refería a ella como acné rosácea. Hoy se sabe que es una enfermedad diferente al acné. La causa de la rosácea hasta momento es desconocida, y lo que sí sabemos es que hay factores que pueden agravarla. Las principales manifestaciones de la rosácea, incluyen enrojecimiento en mejillas, especialmente el área que rodea la nariz, también puede presentarse enrojecimiento en la barbilla, pústulas en la superficie de la piel afectada y aparición de pequeños vasos sanguíneos, entrelazados como en una telaraña conocidos como teleangiectiasias, popularmente se refieren a ellas como “arañitas”
En la medida en que progresa la enfermedad sin el tratamiento indicado, puede a engrosarse de la piel de la nariz, que con el tiempo se transforma en deformidad. Esta situación se presenta mayormente en hombres. La afección ocular puede presentarse con enrojecimiento y en ocasiones hinchazón de los párpados. Todos estos signos usualmente son asintomáticos, aunque en ocasiones puede haber ardor y picazón .Las causas de la rosácea son desconocidas, se dice sin confirmación que puede haber factores hereditarios. Lo que es un hecho, es que hay situaciones desencadenantes de la enfermedad ya establecida. Dentro de estos factores encontramos la exposición prolongada al sol sin ninguna protección, alimentos muy condimentados incluyendo picantes, consumo excesivo de alcohol, especialmente el vino tinto y las bebidas calientes entre otras.
Usualmente no es necesario hacer exámenes de laboratorio para su diagnóstico ya que para el médico es muy evidente la enfermedad. A pesar que la causa es desconocida, se ha encontrado mejoría en tratamientos con antibióticos tanto tomados, como aplicados tópicamente, derivados de la vitamina A, y por supuesto, evitando los factores desencadenantes.
La rosácea es una afección crónica, pero con un adecuado tratamiento y cumplimiento de recomendaciones generales, puede controlarse y aún ser inadvertida. Predomina en las mujeres en edad media o mayores, especialmente de piel clara, aunque también puede presentarse en pieles pigmentadas, donde el diagnóstico es más difícil ya que el enrojecimiento no es tan evidente. Rara vez se observa antes de los 25 años. En casos de deformidad nasal el tratamiento es quirúrgico. Hoy se usa la tecnología láser con muy buenos resultados. La afección ocular requiere consulta y tratamiento con el oftalmológico.
