Con contadas excepciones, cuando consideramos la importancia de la conservación del medio ambiente, nos remitimos a pensar en basuras y en algunas ocasiones en emisiones de gases contaminantes por vehículos e industrias. Pocas veces nos hemos puesto a pensar que hacer con los medicamentos vencidos, y simplemente los tiramos a la basura de los hogares, junto con los desechos usuales. Los medicamentos vencidos, los que se no se consumieron en su totalidad y aquellos que están en el hogar y no sabemos para qué sirven, pueden constituirse en un importante riesgo para la salud pública si no se hace una adecuada eliminación de los mismos.
Los riesgos de la inadecuada disposición de medicamentos vencidos son múltiples. El principal es la contaminación de ríos y fuentes de aguas subterráneas, con lo cual inadvertidamente, las personas pueden estar ingiriendo medicamentos al consumir agua, aunque se trate de agua aparentemente potable, y peor aún, en aquellas comunidades en las cuales no hay acceso a este servicio, donde el peligro no es solo por los medicamentos tirados a la basura, sino por la contaminación adicional con las aguas servidas, ya que muchos derivados de los medicamentos ingeridos, se eliminan por heces y orina. La adecuada disposición no solo se limita a los medicamentos, sino también a los envases que los contienen, porque estos envases incluyendo las cajas, pueden ser utilizados para la adulterarlos, bien sea cambiándolos por otras sustancias, o modificando la inscripción de la fecha de vencimiento.
Amparado en el artículo 8 de la Constitución Política de Colombia, que establece el deber del Estado y de los particulares proteger las riquezas naturales de la nación, y los artículos 79 y 80 que consagran el derecho colectivo a gozar de un ambiente sano, el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, expidió la resolución número 371 de Febrero de 2009. Según esta resolución, los establecimientos farmacéuticos dedicados a la producción, almacenamiento, distribución, comercialización, dispensación de medicamentos, las farmacias, droguerías y las Instituciones Prestadoras del Servicio de Salud, están obligados a participar en la implementación de los Planes de Gestión de Devolución de Productos Posconsumo de Fármacos o Medicamentos Vencidos. Para esto deben tener a disposición y sin costo alguno para los fabricantes e importadores, un espacio para los recipientes o elementos necesarios para que los consumidores finales o residenciales de medicamentos depositen los medicamentos vencidos
En 2010 la industria farmacéutica .nacional y multinacional se une en un programa de Responsabilidad Social Empresarial y nace la Corporación sin ánimo de lucro Punto Azul, que inicia el liderazgo en el programa Posconsumo de medicamentos vencidos, apoyando el cumplimiento a la Resolución 371 de 2009, con el objetivo de generar un impacto medioambiental y social positivo , recolectando, trasportando y llevando hasta sitios de disposición final, medicamentos vencidos o deteriorados con sus respectivos envases. Para estos efectos ubicaron contenedores de color azul en droguerías, farmacias y centros comerciales. Con esta iniciativa no solo se beneficia el medio ambiente, sino que se previene la adulteración y falsificación de medicamentos. En la actualidad la corporación tiene un porcentaje de cobertura de un 60% de la población en Colombia con una cantidad aproximada de 965 contenedores instalados en 23 departamentos del país. Accediendo a su página web, es fácil encontrar el punto más cercano en cada ciudad.
La iniciativa de la Corporación punto azul es indudablemente un valioso aporte a la conservación del medio ambiente, sin embargo, en farmacias, droguerías y sitios de dispensación de Instituciones Prestadoras de Salud, brilla por su ausencia la implementación de mecanismos de información al consumidor para la disposición de medicamentos vencidos o deteriorados. La industria farmacéutica también incurre en la misma falta, al no incluir insertos con estas importantes recomendaciones.
Tan importante como la adecuada eliminación de medicamentos vencidos, es pensar, que si se tienen medicamentos no usados y con fecha de vencimiento lejana, estos pueden ser donados a bancos de medicamentos de instituciones sin ánimo de lucro. Nunca deben suministrarse a otras personas, aunque en apariencia tenga la misma condición o enfermedad de quien los usó previamente.
