Vender las Acciones y Propiedades del Distrito es Vender la Patria Chica.
Desde niño aprendí que la patria chica es el lugar donde nace una persona, y en efecto así es; después, con el paso de los años y el arribo a la juventud aprendí que los humildes del mundo no tenemos patria, porque los todopoderosos de la nación se le habían robado para llenar sus arcas con los bienes despojados a los trabajadores y con las migajas que deja el capital extranjero; sin embargo, el concepto evolucionó, porque a pesar de los saqueos y las injusticias seculares, los humildes si tenemos una o varias patrias a las cuales hay que amar, respetar, hacer respetar y conservar su patrimonio.
En nuestros días el concepto tiene nuevas connotaciones y los diccionarios de la web la definen como la tierra natal o adoptiva a la que está ligada una persona por vínculos afectivos, jurídicos y/o históricos.
En efecto esta es la patria: La tierra y comunidad que un día nos vio nacer en el seno de una familia honesta y trabajadora y nos acogió hasta cuando las circunstancias fueron propicias; más también la patria es esta ciudad Cartagena de Indias, que acogió a miles de nosotros quienes hoy la habitamos con sus carencias, defectos , virtudes y oportunidades, que nos brindó educación atención a la salud, trabajo y alimentación, y posibilitó, en tres palabras: “una vida digna”, aunque las carencias nunca faltaron.
Es esta patria generosa la que nos brindó la oportunidad de construir un buen proyecto de vida, la formación de una nueva familia, varios nietos, estudios superiores, la oportunidad de ser sus gobernantes de primer segundo o tercer rango, pero en fin gobernantes y dirigentes.
Es, en fin nuestra patria hermosa Cartagena de Indias, con un patrimonio cultural valioso para toda la humanidad en su conjunto de más de siete mil millones de seres, y un patrimonio natural hermoso creado por Dios y la naturaleza para nuestro disfrute y para su conservación.
De esta suerte, puede colegirse que a la patria y a una patria tan especial como Cartagena de Indias, solo puede retribuirse el bienestar que nos ha brindado con:
Gratitud, con afectos, con los mejores sentimientos que puede sentir un ser humano,
con la gestión por el bienestar de los demás, con la conservación de su patrimonio, y con la conservación y crecimiento de los bienes públicos, estos que nos pertenecen a todos y no solamente al grupo gobernante, que pretende convertirse y de hecho es una nueva clase dominante.
Sin embargo, muchos de nuestros gobernantes desde presidentes y ministros, desde gobernadores y diputados, desde alcaldes y concejales se olvidaron del noble sentimiento de la gratitud y muchos de ellos se dedicaron a vender los bienes de la patria, los bienes públicos, los bienes de la comunidad, los bienes que no eran de ellos; pero muchos de ellos con su poder mesiánico los donaron al gran capital, a sus familiares y en el mejor de los casos a terceras personas.
Así, en esta línea de acción, despojados de cualquier sentimentalismo, partidarios de la ideología del neoliberalismo gobiernos sucesivos de la nación colombiana se dieron a la tarea de vender “a precio de gallina flaca” las empresas publicas más rentables y los bienes públicos más valiosos, al
punto que a manera de ejemplo, hay que citar lo sucedido en los últimos 26 años a nivel nacional:
1. Durante el gobierno del presidente César Gaviria (1990-1994) se enajeron 30 entidades financieras, varias empresas del sector eléctrico y los puertos de propiedad de la nación, surgiendo las controvertidas sociedades portuarias, a nivel de los puertos marítimos y fluviales, al igual que de los puertos aéreos del país.
2. Los gobiernos de Ernesto Samper (1994-1998) y de Andrés Pastrana (1998-2002) continuaron la línea de vender los bienes públicos, es decir comunitarios, alcanzando el nivel más alto durante el gobierno del Líder del NO.
3. Durante los ocho años de gobierno de este negativo personaje, “entre liquidaciones, ventas, restructuraciones, y restructuración de nóminas, la poda fue del orden de 464 entidades” (www.Caracol Radio.o6/05/ 2010).
En Cartagena de Indias, nos tocó vivir la pesadilla de la venta de los bienes públicos, iniciando con las entidades financieras, continuando con las empresas industriales, de telecomunicaciones y del sector eléctrico, las más rentables de entonces, a pesar de los desfalcos y los malos manejos administrativos y financieros de los funcionarios de “cuello blanco”.
Así en medio de la feria de los bienes comunitarios vivimos como Tele Cartagena, Telecom, Empresas Públicas Distritales, Álcalis, Electrificadora de Bolívar y otras extensas de mencionar, fueron liquidadas o vendidas, tal como afirmé: “A precio de gallina flaca”.
De igual manera vivimos la ocupación impune de algunas zonas de bajamar y de las miradas de “la vista gorda” de algunos gobernantes ante la usurpación de los bienes del distrito por algunos particulares o por allegados a ellos.
Fue esta la apátrida gestión de una clase gobernante que mal vendió los bienes ajenos, con el pretexto de invertir en proyectos prioritarios, cuyos resultados jamás se han visto para el bienestar de las mayorías.
Es esta la misma línea de conducta que hoy quiere continuar el burgomaestre de Cartagena: Vender las acciones que a el Distrito de Cartagena le quedan en la Sociedad Portuaria, una de las más prósperas en el Caribe, una de las más rentables, de la cual la comunidad Cartagenera recibe importantes dividendos, por mucho que hoy se dice lo contrario, justificando el despojo que se pretende hacer.
Sin embargo, el despojo no se dará porque:
1. Un sector importante del Concejo Distrital, a través de su vocera Duvinia Torres ha manifestado a través del Universal. Com que el proyecto de venta de acciones no pasó el estudio de conveniencia y confío que el proyecto será votado de manera negativa y archivado por sécula seculorum.
2. El Consejo Gremial de Bolívar, un importante organismo económico de la región, que sabe de buenos negocios, ha recomendado también la NO venta de las acciones.
3. Un importante sector de líderes comunitarios mostraron su desacuerdo, también frente al desafuero propuesto por el alcalde mayor de la ciudad.
4. Otro destacado sector de la ciudad con voz y voto, como somos los ambientalistas y guardianes del patrimonio estamos diciendo también NO A LA VENTA DE LAS ACCIONES Y PROPIEDADES DEL DISTRITO; hacerlo es convertirse en un vende patria, es traicionar a la patria que tan generosa y tolerante ha sido con los gobernantes.
Sin embargo, somos conscientes que el Distrito necesita ingresos extraordinarios para ejecutar verdaderos proyectos de bienestar comunitarios y por ello recomendamos al gobierno central de la ciudad y al honorable Consejo Distrital las siguientes estrategias.
1. Hacer gestiones exitosas de cooperación internacional.
2. Gestionar recursos de responsabilidad social empresarial ante la mega empresa nacional y multinacional que tanto se benefician de esta urbe.
3. Hacer alianzas público privadas con resultados eficientes, equitativos y transparentes.
4. Sanear la administración de los casos de corrupción que le aquejan.
5. Disminuir la evasión del pago de los impuestos distritales.
6. Aumentar la eficiencia del recaudo del impuesto catastral.
7. Comprometer a los senadores y representantes del Congreso Nacional con la consecución de recursos para los mega proyectos de la ciudad, varios de ellos aprobados por leyes de la República
8. Revisar la errónea política distrital de las OPS, cuya aplicación mancilla la dignidad de los empleados públicos, malgasta el presupuesto e incrementa la politiquería reinante en la administración
9. Eliminar las contrataciones con sobrecostos.
10. Fortalecer las alianzas con la Gobernación de Bolívar, que se ha convertido en un buen socio para el distrito.
11. Sacar de lo profundo del alma ese sentimiento tan oculto y tan escaso como es el de la gratitud con una ciudad y una comunidad que tanto ha contribuido con su proyecto de vida, aunque en muchos casos no se tenga méritos para ello!
12. Pedir a Dios y Cristo Jesús que ilumine sus pensamientos y acciones para lograr el bienestar de los cartageneros y les dé fuerzas para no convertirse en vende patria, porque VENDER LAS ACCIONES Y PROPIEDADES DEL DISTRITO, ES VENDER LA PATRIA CHICA.
Que el 2017 sea de bendiciones para muchos y de mayores bendiciones Divinas para todos, y sea el año de la reconciliación y del Desarrollo Humano de Cartagena de Indias.
¡Salud, amor, paz y prosperidad son mis deseos para ustedes mis queridos y queridas lectores y lectoras, para este próximo año y por siempre!