Calidad en Transcaribe?


Calidad en Transcaribe?
Nadie niega que la puesta en marcha del servicio de transporte denominado Transcaribe, estuvo pensado como la gran solución a la caótica movilidad de esta ciudad, junto con la baja calidad en la prestación del transporte público.
Todos-as en Cartagena sin excepción esperamos con expectativa el rodaje de los busetones, creyendo inocentemente que de seguro todo iría mejor y como por arte de magia en la heroica empezaríamos a superar nuestra propia historia de ciudad de menos mae¡
No puedo negar que ver esos busetones tan atractivos, confortables y elegantes, provocaron un sentimiento de esperanza hacia la superación de las limitaciones históricas que acusa este villorrio en cuanto a cultura ciudadana se refiere.
Viendo andar esos aparatos majestuosos por toda la columna vertebral de la movilidad en la ciudad, fue evidente en primera instancia que la tan cacareada etapa pedagógica no fue más que un remedo de sensibilización pegada con reeducación social para que mínimamente se usara bien el servicio.
Esa fallida etapa pedagógica, dio paso al uso del servicio con todas las dela ley y lo evidente fue mucha improvisación o de pronto mal diseño de la estrategia de implementación, lo cual me permite como usuaria frecuente visibilizar lo siguiente:
Hay deficiente señalización para paradas internas, las cuales son similares a las que se usan en cualquier tablero informativo de una oficina, por ejemplo. Ni con gafas se lee bien cuál es el buseton que se detiene en la puerta tal. Toca recurrir a la pregunta: Aquí para el 106 que va hacia El Rodeo? O de lo contrario mirar la fila más congestionada, detectar caras conocidas para saber dónde ubicarse. Eso no se ha superado y lo que es peor se hicieron cambios en la ubicación para tomar la ruta y no se hizo visible.
Dentro del buseton, si Ud no conoce su parada, no espere que haya una voz española aterciopelada anunciándole: última parada El Rodeo. Ud sabe a juro que ya se acabó el recorrido y más de uno-a creía que el mismo iba más allá.
Hacer la fila para ingresar, solo fue flor de un dia, porque ni los funcionarios pudieron con la horda desesperada por subir . Recuerdo haber visto a un chico que en verdad se esforzaba por organizar la fila y cuando ya no pudo mas dijo: ¡Hagan lo que les de la gana! Y se apartó. Ahora toca ponerse estratégicamente en la puerta de acceso y cuando eso se abre hay que mandarse con toda porque si no te quedaste y entonces media hora más esperando. Para eso tomo una buseta y sanseacabó ¡Nadie , absolutamente nadie hace fila de manera ordenada y respetando turnos. Esa es una utopía.

Algunas rutas demoran hasta media hora en su frecuencia, entonces cual es la diferencia con la buseta? El aire climatizado, no acondicionado. Las rutas son más funcionales para trayectos largos como del Centro hacia La Castellana. Para distancias relativamente cortas el tiempo de espera y llegada al destino se asimila al de una buseta.
Las estaciones que están funcionando, acusan de un notorio desgaste estructural, es decir, un año más sin retoque y reparaciones las convertirían en monumentos a la desidia.
Sin palabras acerca de la no disponibilidad de zonas de descanso y baños para los conductores cuando llegan al final del recorrido en El Rodeo. Eso da vergüenza.
Parece haberse olvidado a quienes se embarcaron en este rollo de Transcaribe, que esta ciudad maneja promedio de temperatura 32º C , y esperar hasta media hora en las estaciones de la ruta 106 por ejemplo, es un atentado contra la salud del usuario; me dicen que cuando se llega al recién inaugurado patio portal se recibe la misma dosis.
Con todas esas generalidades, me pregunto: Ese es un servicio de calidad? No se supone que servicio si Transcaribe está diseñado para mejorar la calidad de la movilidad en Cartagena y la vida del usuario-o, debería ser reflejo de ello en cuanto a pedagogía ciudadana sostenible, señalización estandarizada y permanente en las estaciones, mapa de rutas visibles y de fácil lectura, regularidad en los tiempos de llegada a las estaciones, aseo y ornamentación , señales de alerta en zonas de peligro para abordar, casetas para protegerse del sol canicular o una eventual lluvia, casetas para los conductores en la estación El Rodeo, aumento del número de busetones para las estaciones que registran la más alta frecuencia de uso.
Me temo con algo de pesimismo: Transcaribe no resistirá el uso y el abuso. No es verdad que el solo embelesamiento por andar con aire acondicionado y tomarse solo 45 minutos para llegar al centro, pueda ser el máximo de estándar de calidad para este servicio. Esos otros indicadores al parecer nimios para los administradores del sistema, al final pueden ser la gota que rebose el vaso y genere toda suerte de situaciones conflictivas en detrimento de una excelente oportunidad hacia más y mejores evidencias de cultura ciudadana en práctica, apropiación y defensa de lo público.
Quiero creer como usuaria frecuente del servicio que estoy exagerando y todo irá bien, confío en eso, pero no se me olvida que educar para el cuidado y respeto por lo público no es un asunto de buena voluntad sino que implica corresponsabilidad , compromiso, sosteniblidad : Nadie da de lo que no tiene aunque se lo exijan.
El tiempo hablará y espero no me dé la razón.


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