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Cuando la Gobernación de Bolívar manifestó su interés en hacer el centro de Bienestar Animal, expresó haber consultado el querer y el deseo de las organizaciones animalistas de Cartagena y eso es rotundamente falso.
El 99% de los animalistas del departamento no fuimos consultados, y no es el centro de Bienestar Animal lo que los animales del departamento de Bolívar necesitan, no necesitan una carcel donde lo único que realmente tendrán será hacinamiento y muerte. Eso parece extraño pero a lo largo del texto explicaremos el porque.
Durante la presentación del proyecto que se hizo el año pasado en la Casa de la Moneda, la cual valga aclarar no fue una presentación democrática, ni abierta, ni convocada a través de medios sino en circulo cerrado y de boca a boca, los pocos asistentes, manifestamos nuestras inquietudes, miedos y temores y resaltamos todos los vacíos e inconsistencias de la iniciativa.
Notamos en el gobernador Dumek Turbay su excelente disposición, buena voluntad y buena energía, pero su total desconocimiento del tema, y lo mal asesorado que está.
Cuando le preguntamos como se justifica invertir 3500 millones en la construcción de una perrera – cárcel para animales en la que solamente cabrán 400, él miro sonriente a tres “animalistas” sentadas a su derecha y dijo que tenía listos contratos millonarios con fundaciones que apoyarían el Centro de Bienestar animal.
En ese evento no se nos permitió grabar, hicimos más de 20 preguntas, las cuales prometieron responder en corto tiempo, prometieron también que nos reuniríamos en reuniones más amplias y con mayor convocatoria y que todo se resolvería. Nada de eso ocurrió, no hubo más convocatorias, no hubo más reuniones, no hubo nada, los miedos y temores que los asistentes expresamos en esa reunión, no han sido resueltos, todo se está manejando por debajo, a oscuras y de espaldas tanto a los defensores de animales como a la opinión publica.
Tal y como está planteado el proyecto, eso será un centro de zoonosis, perrera y matadero departamental de perros y gatos, ya que si solo en la ciudad de Cartagena hay más de 300 mil perros y gatos en situación de calle, en el departamento habrá millones. Y están invirtiendo 3500 millones en la construcción de un proyecto inmobiliario en el que solo cabrán 400.
Si el gobernador no hubiera caído en un pacto electoral politiquero, y hubiese de verdad convocado al movimiento animalista autentico en pleno, le hubiéramos explicado que no necesitamos otra cárcel matadero para perros, que ya tenemos una a nivel distrital, que ha funcionado durante siete años disfrazada de fundación defensora y que solo se ve bonita en las redes sociales, en facebook y en instagram, pero que en la vida real ha sido una GRAN ESTAFA y una historia de terror espeluznante.
Le hubiéramos dicho que lo que necesitamos, lo que necesitan los animales del departamento de Bolívar es el establecimiento de la esterilización masiva y gratuita como política de Estado, y un hospital veterinario gratuito para los estratos 1 y 2.
Ya era escandaloso y preocupante los términos en los cuales nos mostraron el proyecto, pero nos vendieron la idea de que estaría en el Coliseo de Ferias, muy cerca de la Terminal de Transporte, a un bus de distancia, lo que daría la opción de estar encima, verificando que se respetara la vida y la dignidad de los animales.
Nos enteramos finalmente que no se construirá donde nos prometieron, sino en Santa Rosa Norte, allá nadie va a ir y eso será sin lugar a dudas un matadero de perros, ¿Quién los detendrá? ¿Quién defenderá a esas pobres criaturas de los falsos animalistas? .
Un perro vive en buenas condiciones (vacunas, vitaminas, amor, paseos) entre 12 y 15 años. ¿Hay acaso alguien tan pendejo e ingenuo que piense que la gobernación del departamento de Bolívar va a mantener a perros mestizos, “chandosos”, vulnerables e inadoptables con vida tanto tiempo con presupuesto oficial? Será un matadero sin duda. Como lo han sido por años las zoonosis de Bogotá y Cali.
Si los políticos bolivarenses no sienten compasión ni misericordia de las personas, y no tienen temor de Dios por todo el mal que le hacen a la gente, mucho menos tendrán piedad de los animales, no en vano son la mayoría de ellos corralejeros, eso será solo un negocio y una piña millonaria de contratos.
Por esto y mucho más, porque los términos y condiciones en que se planteo y está desarrollando el proyecto del Centro de Bienestar Animal incumplen el requisito de transparencia, de consulta a las comunidades afectadas y a las garantías de la vida y supervivencia de los animales, estamos instaurando acciones legales para detenerlo.
Pienso que el gobernador Dumek Turbay es un buen tipo, bien intencionado pero está siendo descaradamente engañado y manipulado por politiqueras que disfrazadas de animalistas, han acaparado la contratación estatal por los últimos años, y que lo último que quieren o les interesa es el bienestar de los animales.
Además de que aquí hay un claro detrimento al patrimonio estatal ya que invertir solo en construcción, 3500 millones para “beneficiar” a solo 400 perros que serán asesinados al termino de un tiempo, es un exabrupto cuya insensatez no vale ni siquiera argumentar, salta a la vista.
Y ¿Por qué en Santa Rosa Norte y no donde nos dijeron inicialmente? ¿Por qué tan lejos? ¿De quién es ese terreno? ¿Cuanto cuesta? ¿A quien se le consultó la conveniencia de hacerlo allí? ¿A que “amigo” o “amiga” se está beneficiando con este cambio?
Si bien la ley 769 de 2002 establece la construcción de cosos (depósitos, mataderos de mascotas) la ley de bienestar animal 1774 del 6 de enero de 2016, los declara sujetos de derechos civiles y echa por tierra todo lo legislado anteriormente.
Hacemos un llamado público a todas las instancias locales y departamentales, a los empresarios, a los gremios, a las cámaras de comercio, a las Universidades, que hagamos un frente común por los animales, a cambiar la historia y a hacer historia.
Esta es una oportunidad de oro para hacerlo, manos a la obra.
