Amo hablar de Ciclo Siete. Una semana en la que cualquier organización o ciudadano puede aportar con pequeñas o grandes acciones para generar conciencia respecto al desarrollo sostenible y la necesidad de impactar positivamente en nuestro ecosistema.
Aunque nos hemos encontrado con que en la ciudad aún hay mucho desconocimiento del tema, poco a poco hemos logrado que diversas instituciones se vinculen a esta iniciativa para construir un mundo mejor para nuestras futuras generaciones.
A los que no conocen de qué hablo, les cuento: Ciclo Siete nació en Medellín, gracias a la organización Portafolio Verde conformada un grupo de ciudadanos preocupados por los problemas medio ambientales por los que atravesaba el país -contaminación atmosférica, deforestación, degradación del suelo, minería ilegal, entre otros- quienes asumieron el reto de crear un evento que se posicionara como las Olimpiadas por la Sostenibilidad en Iberoamérica, con el desafío de mostrarle al mundo que a través de diferentes experiencias se puede generar conciencia y un fuerte llamado a la acción que permita cambiar la dura realidad que está viviendo nuestro medio ambiente.
En su quinta versión, celebrada en la primera semana de abril (por aquello del Mes de la Tierra y la Biodiversidad) lograron que 23 países se unieran para trabajar por la sostenibilidad y dar un mensaje inspirador al resto del mundo. Por supuesto en Cartagena no nos quedamos atrás y generamos toda una Agenda de Ciudad, con la vocería de la Sociedad de Mejoras Públicas y el apoyo de más de 50 empresas y fundaciones de la ciudad.
Fue hermoso ver cómo ciudadanos del común, líderes comunales, fundaciones, estudiantes de colegios, universitarios, entre otros, se unieron alrededor de actividades en las que tuvieron la oportunidad de conocer, compartir y vivir la sostenibilidad: jornada de avistamiento de aves, limpieza en playas y mangle, siembra de especies, charlas de sensibilización, feria por la sostenibilidad en el Centro Comercial Caribe Plaza, eventos culturales como el Festival del Amor Consciente, entre otros espacios.
Sin embargo aún hay un gran porcentaje de ciudadanos que poco o nada hacen por nuestro ecosistema, aunque reconocen que la ciudad necesita del apoyo de todos para ser más sostenible. Según el último estudio de Cartagena cómo Vamos el 70% de los cartageneros está insatisfecho con las basuras y escombros en las calles, el 66% con la contaminación del aire, y el 51% con la calidad del agua.
Me atrevo a decir que un gran número de ellos bota por la ventana del bus el papelito de la chuchería que se comió o el chicle “porque es biodegradable”. O son de los que duran horas bañándose sin arrepentimiento de desperdiciar el agua. O peor aún, dejan el cargador del celular pegado toda la noche porque eso “no gasta energía”.
Eventos como Ciclo Siete son apenas un granito de arena para contribuir a un cambio de mentalidad que debemos de tener todos. Pero ¡necesitamos que el cambio sea siempre, no solo una semana!
Nuestro patrimonio natural y biodiversidad son un gran potencial que desde el medio ambiente representa inmensas oportunidades para el desarrollo económico y social del país. Pero, así mismo cada vez se ven más amenazados ante la inclemencia de los ciudadanos y las lágrimas de dolor de un planeta bombardeado por diferentes fenómenos contaminantes en los que tristemente la humanidad es protagonista.
Es hora de hacer el cambio. ¡Súmate todos los días con pequeñas acciones, que al final generarán grandes cambios!