En la mayoría de países del mundo los gobiernos utilizan diversas estrategias con el objetivo de tener control sobre las arcas y los impuestos que ingresan a la nación. Aunque en todos los países este trámite tiene nombre y procesos diferentes, la finalidad es la misma: el RUT. En Colombia el Registro Único tributario (RUT) es obligación para todas las personas que inician una vida laboral como independientes o tienen alguna relación comercial.
En Colombia este código es considerado como el único mecanismo que permite identificar, clasificar y ubicar a las personas naturales y jurídicas. Este seguimiento recopila información de los trámites tributarios, aduaneros o cambiarios de las empresas que deben declarar renta, ingresos o patrimonio.
Si una persona -con obligación de sacar el RUT- es sorprendida sin este requisito puede acarrear consecuencias muy desfavorables tanto para su negocio como para su vida laboral. Algunos de ellos es no poder presentarse a procesos de contratación pública, dificultades para presentarse ante nuevos clientes como un proveedor confiable por no cumplir con los mínimos de ley, sanciones por parte de las entidades de inspección, vigilancia y control en el momento de una visita a su negocio o no poder acceder a los beneficios que el gobierno genera para los empresarios.
No obstante, las personas que cumplan efectivamente con este trámite también reciben estímulos y beneficios que pueden verse reflejados en el éxito en los negocios y el éxito financiero.
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El primero de los beneficios que se otorgan a quienes deciden expedir el RUT es que podrán recibir acompañamiento de la Cámara de Comercio en su proceso de formalización con un amplio portafolio de oportunidades para seguir fortaleciendo su empresa.
La Cámara de Comercio trabaja constantemente en el cumplimiento de estrategias de formalización. Con asesorías personalizadas en las instalaciones de la CCC o en visitas a los negocios, los comerciantes e independientes acceden a información de primera mano sobre la cantidad de trámites que requieren al momento de crear empresa. Esta estrategia surgió gracias a que identificaron una problemática de los ciudadanos a la hora de enfrentarse a cumplir con los trámites. No había un buen proceso comunicativo en el que los usuarios entendieran cómo debían cumplir con los documentos o simplemente les parecían demasiado técnicos y, en muchas ocasiones, optaban por la informalidad.
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Otro de los grandes beneficios es tener la posibilidad de convertirse en contratista del Estado.
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Adicionalmente, tienen la posibilidad de recibir asesoría estatal en los pasos claves para ser un proveedor exitoso y lograr ser proveedor de empresas más grandes.
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También pueden acceder a mejores oportunidades de financiación para la empresa con entidades como Bancóldex.
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Puede ser beneficiario o presentarse a los programas de fortalecimiento empresarial que tiene INNpulsa.
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Quienes expidan el RUT también pueden hacer parte del programa Compre Colombiano y acceder a otros servicios que el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y Propaís tienen para los pequeños empresarios formales.
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Además, quienes optan por formalizar su trabajo, su seguridad social mejora.
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Y por si fuera poco, el IVA que su empresa factura, puede ser descontado.
Por lo anterior, si usted tiene un negocio es recomendable mantenerse al día con la renovación de la Matrícula Mercantil y acogerse a los beneficios que ofrece el Gobierno Nacional.
