¿Por qué ganó William Dau? Ganó porque el pueblo lo sintió, lo leyó como la única opción diferente para dirigir los destinos de Cartagena. Ganó porque la gente aplicó el voto castigo en contra de lo tradicional. Ganó porque supo aprovechar y capitalizar su eslogan de campaña, “lucha contra la corrupción”, como él dice, contra los malandrines que tienen secuestrada la administración distrital. Ganó porque su discurso en redes sociales, en encuentros ciudadanos, en los debates, en todos los escenarios fue calando, calando y germinó en la intención del voto ciudadano.
Y también, ganó porque el otro William, le dio la papaya de no asistir a los debates, se creía ya el alcalde o se confió de las encuestas. Y se puede agregar, que los dos, es decir, William García y Yolanda Wong, parecían candidatos iguales en relación con las maquinarias, eran lo tradicional, lo mismo de lo mismo.
Se repite la historia de Guillermo Paniza, Judith Pinedo, Campo Elías, Manolo y hasta Dionisio. El pueblo se decide por el que percibe como el menos político. Es una tendencia significativa en Cartagena que resulta profundamente transformadora de la democracia local. Pueden invertir ríos de dinero en la compra de votos, pero el voto castigo, de opinión sale ganador. Situación que nunca se ha presentado a nivel de gobernación, donde los electores siguen eligiendo al mejor postor, el que dé más apoyo económico con ese se van a la urnas.
William Dau Chamat es un fenómeno político, porque no es político. Una persona viviendo en la comodidad de una ciudad como New York, después de 15 años, llega a su ciudad en los primeros meses de este año 2019, generando un espacio de opinión entre los ciudadanos. Y con el uso de la tecnología le permite llegar a muchas personas y en especial a los jóvenes. Su caballito de batalla, “lucha contra la corrupción”, va cuajando en una ciudad desprestigiada, cansada, aburrida de soportar 12 alcaldes en los últimos 8 años. Hasta que la gente, rompió las cadenas, se liberó del yugo saliendo a votar por Dau.
Todos los que votamos por William Dau Chamat y lo que no votaron, esperamos un alcalde de 4 años. La ciudad no aguanta otra interinidad. Afortunadamente todo hace suponer que el nuevo alcalde, está limpio sin ninguna investigación a la vista. Su talante de hombre pulcro y transparente le apostó la ciudadanía. Hay que rodearlo con los mejores hombres y mujeres para que logre gobernar una ciudad acéfala de nuevos liderazgos.