El aguacate es uno de los frutos que más se produce en Latinoamérica. En la cabeza de la lista de principales países productores está México, por lo que es muy común encontrar en ese país deliciosas recetas a base de aguacate para acompañar los tacos, burritos o quesadillas.
Sin embargo, hay que destacar que el mercado del aguacate ha experimentado un crecimiento positivo en los últimos años en muchas otras partes del mundo, especialmente en Europa. A diferencia de las cifras que reportó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, ONUAA, en 1999 Europa era uno de los más bajos consumidores de aguacate en el mundo.
En la actualidad, los países europeos se repuntan como los segundos mayores consumidores de este alimento a nivel mundial.
A pesar de que existen cerca de 60 países en el mundo que producen el aguacate, países como México, República Dominicana y Colombia se destacan como los principales productores a nivel internacional. Por su parte, México no solo representa producción sino también consumo. Los mexicanos, por supuesto, no se pierden del ‘oro verde’ (como también es llamado haciendo alusión a la gran acogida que tiene este fruto) y es el tercer gran consumidor a nivel mundial.
México abastece tres de las variedades más reconocidas: el aguacate hass, el aguacate criollo y el aguacate fuerte. No obstante, en el mundo existen cerca de 500 tipos diferentes.
No hay que discutirlo. El aguacate es delicioso. Además, aporta energías para los comensales en cualquier preparación. Al desayuno, otorga nutrientes y acompaña muy bien el pan y las tostadas. Al almuerzo condimenta la ensalada y les da un toque especial a los platos fuertes. Adicionalmente refuerza cualquier cena o comida durante la noche.
En los últimos años, la producción de aguacates de México alcanzó alrededor de un millón 600 mil toneladas, de las cuales ha exportado cerca de un millón 400 mil toneladas. Esta cifra supera tres veces en ventas a República Dominicana, que es su principal rival.
La comercialización de este fruto está creciendo exponencialmente en el mercado internacional, y se ha posicionado con grandes perspectivas de desarrollo en diferentes países del mundo debido a la fuerte demanda de variedades como el aguacate Hass.
España retrata el vivo ejemplo de países que más apetecen el aguacate. 2018 representó un año histórico para el gremio de aguacateros de España, porque por primera vez se consumieron más aguacates de los que se cultivaron. A tal punto de que más de 74 millones de kilos fueron exportados casi que obligatoriamente para poder saciar la fiebre del “oro verde”.
Muchos comerciantes han indicado que se sienten satisfechos pues las condiciones del mercado europeo se han mantenido estables puesto que el consumo ha aumentado y muchos empresarios están incursionando en la venta de este producto.
Como es el caso de Naranjas Eco que cultivan aguacates ecológicos en Valencia una región de España donde hasta hace pocos años era imposible el cultivo de frutas tropicales, pero que el cambio climático global le a proporcionado un clima adecuado ya para su cultivo
Adicionalmente, el panorama pinta cada vez mejor. Los pronósticos de la Organización Mundial del Aguacate (WAO) auguran cifras aún mayores para los siguientes años, a nivel que deben empezar a pensar en estrategias para mitigar un posible desequilibrio entre oferta y demanda de aguacates en el mundo.
