[inline:Imagen de un toro abrazando a quien los criaba para lidia y quien a partir de este cariñoso abrazo de este noble animal, tomó la decisión de no volver a criar toros para su tortura..jpg]
Un día ese toro se puso sorpresivamente en dos patas, y le dio a este hombre un abrazo inmenso, agradecido y cariñoso, que quedó registrado ante las cámaras.
Ese abrazo salvó muchas vidas.
Salvó la vida de ese hombre, porque ese día entendió, la inmensa maldad, de mandar a estos bellos y nobles animales, a la tortura y el martirio, a una muerte cruel, diseñada por psicopatas.
Ese hombre nunca más, volvió a criar toros de lidia.
Ese noble toro, y sus amigos, tuvieron el privilegio de vivir en paz, y de morir de muerte natural, tal y como debe ser.
Abre tu mente a esta hermosa verdad, los toros nacieron para vivir sus vidas, para ser felices, no para morir sangrienta y dolorosamente, para divertir a una banda de enfermos del alma.
Abre tu corazón, se parte del cambio que el planeta necesita.
No descansaremos hasta eliminar la tauromaquia.
Cada vez somos mas los que clamamos el fin de este horror.
Porque queremos vivir en paz
Repudiamos toda forma de violencia.
Y la tauromaquia no es más que sadismo y tortura organizada.
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Tomado del libro Las voces del silencio.
