8 de junio: Día mundial de los océanos y del estudiante caído.


8 de junio: Día mundial de los océanos y del estudiante caído.

0.EN MODO INTRODUCCIÓN.

Traer al presente hechos históricos, sociales y políticos, sucedidos hace 96 años, por una parte, y por otra, celebrar, un suceso que partió en dos la visión de los terrícolas sobre el ambiente del planeta Tierra, va más allá de la intencionalidad teórica y pretende motivar la consciencia individual y colectiva para pasar a la acción transformadora, orientada hacia el bienestar de las generaciones presentes y futuras.

 

1. OCHO DE JUNIO DE 1992.LA CUMBRE SOBRE LA TIERRA EN RÍO DE JANEIRO DECLARA EL DÍA MUNDIAL DE LOS ÓCÉANOS.

Fue en esta fecha, cuando lo más granado del ambientalismo mundial en la Cumbre de la Tierra: Río 92, declaró el ocho de junio Día Mundial de los Océanos que bañan la Tierra, como son los siguientes: Atlántico, Pacífico, Índico, Ártico y Antártico.

 

Los dos últimos bañan las zonas polares del planeta, el Índico, gran parte del sur de Asia y del oriente de África; el Atlántico a Europa, y de manera especial a Nuestra América, al igual que el océano Pacifico, que también baña las costas del continente asiático, americano y de Oceanía.

En realidad, este día encierra una gran significación al entender que los océanos son uno de los grandes garantes de la vida, en su propio lecho, sobre los continentes y las zonas insulares.

La IA inteligencia artificial de Google, y otros chats referencian 17 beneficios para los seres vivos de la Tierra:

1.Seguridad alimentaria.

2. 50 % del oxígeno que respiramos.

3.Regulación del clima mundial.

4.Recursos naturales.

5.Transporte.

6. Estructura de la economía.

7. Ecosistemas costeros.

8. Salud mental.

9.Biocombustibles.

10.Materias prima para la fabricación de medicamentos.

11.Turismo.

12. Conservación de la biodiversidad.

13. Fuente de trabajo directo e indirecto.

14. Fuente de inspiración romántica y poética.

15.Laboratorios vivientes y fuente de estudios históricos.

16.Comunicaciónn y unión en a las comunidades costeras.

17. Sirven de base para la construcción de la identidad cultural de pueblos y regiones.

Frente a este listado, incompleto, ¿qué más podemos  pedir los humanos a la naturaleza? 

¿Qué podemos hacer los terrícolas por estos elementos vitales para nuestra existencia?

Es mucho lo que debe hacerse:

***detener la pesca devastadora de las grandes compañías pesqueras de las potencias imperialistas que hoy controlan el mundo.

***Detener la contaminación, hasta ahora imparable.

***Realizar campañas periódicas para limpiar los cuerpos de agua.

*** Solicitar a las Naciones Unidas, la descontaminación de mares y océanos en el mundo.

Todo ello, con grandes acciones de masas, a gran escala, conscientes de la importancia vital de los océanos y mares de la Tierra.

A nivel de la Ecología de la Cotidianidad, vale escribir, de aquella que a diario vivimos, es muy importante, reusar los plásticos, hacer la separación en la fuente de los residuos sólidos y poner a disposición de los recicladores, aquellos susceptibles de ser transformados y cobrar una nueva vida útil.

Educar, siempre, en cualquier oportunidad, a nuestros hijos, nuestra familia, amigos, vecinos, comunidades, gobernantes, estudiantes,funcionarios turistas y visitantes, sobre la importancia de vivir de manera sostenible y en estrecha amistad con la naturaleza y el ambiente.

Que la celebración del próximo ocho de junio nos motive a poner en práctica estos sencillos principios de la vida sostenible y del desarrollo humano sostenible.

 

1 .2. EL MAR CARIBE: NUESTRO INVALUABLE ECOSISTEMA DEL OCÉANO ATLÁNTICO.

Refiriéndonos a nuestro mar Caribe cartagenero, parte vital del océano Atlántico, es preciso tener presente   los principio anteriores.

 Sin embargo, es necesario, también, que las corporaciones, los establecimientos públicos ambientales, las autoridades marítimas nacionales y distritales asuman la responsabilidad de recuperar los cuerpos internos de agua, devolviéndole su vieja vitalidad y eliminando los factores de la contaminación y las invasiones.

 

Es válido también, controlar y dar fin a las invasiones, y a los pequeños y grandes contaminadores, que destruyen los procesos de la vida en las bahías y ciénagas de la ciudad, así como también ejecutar con eficiencia, eficacia y prontitud el plan de recuperación de la bahía de Cartagena ahora en marcha muy lenta, pero dotado de varios millones de dólares para su ejecución.

Es imperante que las autoridades marítimas, de todos los niveles político-administrativos y las empresas usuarias, desarrollen desde ahora, un vasto programa de recuperación integral de los cuerpos de agua.

Todo ello acompasado con un programa de “Educación Ambiental de Cara al Mar Caribe”, centrado en el eje temático “Cartagena de Indias: Ciudad Puerto con desarrollo ambiental y humano sostenible”, dirigido al ciudadano de a pie, a los trabajadores de los puertos y muelles, a las empresas concesionarias, a los usuarios y a todos los relacionados.

…Y en calidad de una corta pausa sobre el tema, en este espacio es imperante que el Distrito Cartagena de Indias deje de tratar a la educación ambiental, como la cenicienta de la urbe: sin recursos importantes para afrontar la crisis de cultura ambiental que nos consume, y sin dolientes mayoritarios en las esferas oficiales.

 2. OCHO DE JUNIO: DÍA NACIONAL DEL ESTUDIANTE CAIDO.

2.1. Ocho de junio: una fecha para rendir homenaje a los caídos y preservar la memoria histórica.

Evocar la fecha del estudiante caído, vale escribir, victimizado en Nuestra América y de manera especial en Colombia, donde decenas de estudiantes fueron sacrificados por la violencia estatal, produce nostalgia en nuestros seres.

No obstante, a su vez, da ánimos para continuar convocando a los estudiantes del mundo y de nuestro país, a no desmayar, a continuar con la histórica lucha, pacífica y libertaria, incesante por construir una sociedad justa, pacífica e independiente del imperialismo globalizante.

Es esta fecha, la ideal para recordar a aquellos adolescentes y jóvenes que a través de la historia cayeron muertos defendiendo sus propios derechos, los derechos humanos y la dignidad de la vida comunitaria.

Es la ocasión precisa para rendir un homenaje a los caídos y a sus familiares   y decirle al movimiento estudiantil: ¡Adelante muchachos! ¡No se detengan! No hay camino, ¡se hace camino al andar!, tal como una vez escribió el poeta Antonio Machado.

El hecho histórico que da origen   a la conmemoración sucedió un ocho de junio del año 1929, cuando los estudiantes de la Universidad Nacional de Colombia, en Bogotá protestaban contra la masacre de las bananeras en Ciénaga Magdalena y sus cercanías.

Víctima de la represión policial cayó muerto el estudiante Gonzalo Bravo Pérez, con sus sueños e ilusiones a cuestas convertido en uno de los primeros mártires del movimiento estudiantil nacional

La masacre de 1928, bajo el gobierno del presidente conservador Miguel Abadía   Méndez, dejó como funesto resultado más de 3.000 obreros muertos y varios pueblos arrasados por la violencia oficial.

Quedó así, una imborrable huella en el alma social de los habitantes del Caribe colombiano, Colombia y América Latina, y de manera especial en la ideología del movimiento estudiantil colombiano, que nunca olvida a sus mártires, así como tampoco a los trabajadores luchadores contra    las explotadoras compañías multinacionales y nacionales, y los gobiernos opresores de años atrás.

El siguiente hito luctuoso se repite en 1954, en las protestas realizadas por los estudiantes de la Universidad Nacional, a las cuales, el gobierno del presidente dictador Gustavo Rojas responde con la más insana violencia dando muerte al estudiante Uriel Gutiérrez Restrepo y dejando numerosos heridos.

Es a partir de esta fecha, (1954) cuando el Día Nacional del Estudiante Caído se  toma el territorio nacional y se convierte en un hito de celebración para el movimiento estudiantil colombiano.

Este continuará asumiendo su papel de, denunciante de los regímenes injustos y opresores,  de la dependencia externa frente al imperialismo, su lucha por el derecho propio a una educación gratuita de calidad, y el papel de apoyo a las luchas de los maestros, proletarios y campesinos.

Este transcurrir histórico forjará otras fechas cumbre: la derrota electoral del partido conservador bajo el gobierno de Abadía Méndez, y la caída de la dictadura de Gustavo Rojas Pinilla en 1957.

De igual manera se destacan los años 1971 y 1972, cuando el movimiento estudiantil y magisterial rechazan y consiguen que el gobierno del presidente conservador Misael Pastrana, engaveten el proyecto de Estatuto docente y el Plan de Estudios Generales de la educación superior.

Son las décadas de los años 70 y 80 del siglo pasado, marcadores imborrables de las luchas estudiantiles, ora victoriosas, ora vencidas, de manera transitoria; es la época de los cierres de las universidades públicas, de la facultades de ciencias sociales, cancelación de semestres académicos, y el por demás imborrable marcador de los “rectores más represivos de la historia de la educación nacional”.

Es también el tiempo de los enfrentamientos del movimiento estudiantil con las fuerzas policiales y militares, los cuales dejan heridos en ambos sectores; hijos del mismo pueblo y clase social, al igual que estudiantes desaparecidos quienes una vez salieron a una marcha de protesta pacífica y jamás regresaron a sus casas.

2.2. EL CARIBE COLOMBIANO TIENE TAMBIÉN SUS MÁRTIRES ESTUDIANTILES.

Al igual que Bogotá, y otras ciudades colombianas, Nuestro Caribe colombiano de manera lastimosa tiene sus mártires estudiantiles, y fue también escenario de las medidas represivas del Estado colombiano.

Fue el martes cinco de octubre de 1971, cuando en un enfrentamiento entre la fuerza pública, los estudiantes de la Universidad del Atlántico, del Colegio Barranquilla (Codeba) y de otros centros educativos de bachillerato de la ciudad, dejó como trágico resultado la muerte del estudiante del Codeba Julián Restrepo Villarreal.

En ese día luctuoso, después de una gran asamblea general en la cafetería de la U. los estudiantes se disponían a marchar junto con los del Codeba; de inmediato la fuerza pública rodeó los establecimientos educativos circunvecinos, y los atacó con gases lacrimógenos.

La fallida marcha del Colegio Barranquilla fue dispersada; Julián Restrepo, quien no participaba en la protesta salió, corriendo, y dio su último tropezón: cayó al suelo, costándole la vida.

Las versiones sobre el lamentable hecho son contradictorias: mientras el dictamen médico legal decía que la muerte fue producto del golpe  que se dioel muchacho al caer; fuentes del Hospital de Barranquilla afirmaron que el deceso se debió a múltiples golpes en la cabeza, de acuerdo con el testimonio del periodista Aníbal Cotes.

 Por razones de espacio remitimos a los lectores a la web: zona cero.com/50aniversario de las luchas estudiantiles, al igual que a la web: centrodememoriahistórica.gov.co/Día Nacional del Estudiante caído.

Hoy, duele mucho recordar estos sucesos, los cuales hacen parte de nuestra memoria viva del movimiento estudiantil y dejan como enseñanza la necesidad de continuar la lucha pacífica por las reivindicaciones económicas, sociales, políticas y culturales de los sectores populares y clases medias de la nación.

PD. Imágenes:  eluniversal.com

Con los afectos de siempre.

UBALDO JOSÉ ELLES QUINTANA.

AMBIENTALISTA. PATRIMONIALISTA.


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