ALCALDE DAU: SÓLO LOS NECIOS PERSITEN EN SUS ERRORES.

0. A manera de introducción: En defensa de la política anticorrupción.

Los objetivos del presente ensayo están centrados en reconocer y apoyar la política anticorrupción que en la presente coyuntura implementa el actual alcalde de Cartagena, rechazar la inoperancia de los entes de investigación, control y aplicación de la justicia, de manera especial ante las denuncias formales que a sus despachos ha presentado el burgomaestre, y a su vez rechazar también las estrategias no válidas que utiliza el alcalde William Dau para conseguir sus objetivos políticos.

1. LA POLÍTICA ANTICORRUPCIÓN Y LOS ENTES DE CONTROL Y DE JUSTICIA.

Después de un largo proceso de meditación sobre los últimos sucesos políticos y sociales que convulsionan nuestra sociedad cartagenera he decidido en segunda ocasión, valorar las actuaciones, del alcalde William Dau, elegido por cientos de miles  de ciudadanos, quienes soñamos hace dos años  una Cartagena sostenible y más amigable entre nosotros mismos  y los demás seres de la naturaleza  y con mejores índices de bienestar comunitario, lo cual no ha sucedido así, en diversos ámbitos de la vida económica, social, política y cultural. 

Hoy por hoy, hay que reconocer que el gran mérito del alcalde es su lucha frontal contra los corruptos, contra aquellos militantes de la política tradicional, que hicieron de las arcas de la ciudad su mejor manera de hacerse a un capital o aumentar este, a costa del hambre y la insatisfacción de las necesidades básicas de las mayorías cartageneras, situación que se incrementó con la actual pandemia que nos arrebata a familiares, amistades, colegas y coterráneos de diferentes categorías sociales.

También es de destacar a la par del factor antecedente, la inoperancia de algunos entes de control de la urbe y la nación para aplicar la justicia, desde sus respectivas esferas y competencias de funciones, investigar, acusar y dictar sentencias condenatorias, a quienes continúan   apoderándose del pago de nuestros impuestos, regalías nacionales y de otras fuentes de recursos que hacen parte del erario distrital, y agenciando la corrupción de múltiples maneras.

Es este el motivo que lleva a la exasperación al alcalde mayor del  distrito, quien despotrica, contra las instituciones y sus funcionarios, cayendo en una serie de errores,  los cuales históricamente se repiten, desdibujando en la mayoría de los electores su imagen como gobernante, causando frustración  entre miles de miles cartageneros, de manera especial ,entre quienes visionamos  con su elección , al líder que encabezaría el inicio de la solución de algunos de los graves problemas que afectan  a la ciudad en su conjunto, y de modo principal a las mayorías desposeídas de recursos económicos y de un ingreso laboral que dignifique su vida.

En nuestros días hay que reconocer que la abominable mancha de corrupción que cubría a las entidades distritales hoy ha desaparecido de algunas de ellas, vale escribir a manera de ejemplo, del Fondo de Pensiones de Cartagena, y que hoy es poco el esfuerzo que hacen los entes de control, investigación y de justicia por aplicar las medidas correctivas que pide el alcalde y las mayorías ciudadanas.

2. LA LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN NOLE OTORGA EL DERECHO DE SEGUIR EQUIVOCÁNDOSE EN EL EJERCICIO DE SU MANDATO.

Sin embargo, alcalde, su lucha contra las diferentes manifestaciones de la corrupción en la ciudad no le otorga derecho alguno, para continuar incurriendo en los graves errores históricos que a lo largo de más de sus dos años de administración ha venido cometiendo; por ello me referiré a los últimos desafueros cometidos por Ud. en sus arrebatos coléricos mediáticos.

A. Su desafortunada afirmación de “irse a las vías de hecho”, aparecida en El UNIVERSAL del día sábado 22 del presente mes y año (p.24.Sección Panorama):

“Si este señor Rafael Castillo se atreve   a suspender a uno de mis funcionarios vamos a recurrir a las vías de hecho, porque a Cartagena se le respeta” …

Totalmente de acuerdo con Ud. respecto a esta última afirmación: a Cartagena “se le respeta “y hay que hacerla respetar.  Sin embargo, recuerde que ir a las vías de hecho es: “Una actuación de la administración realizada sin competencia o prescindiendo totalmente del procedimiento legalmente establecido”, de acuerdo con el diccionario de la lengua española y Ud. es el menos indicado para utilizar estas vías, al ser el primero en estar llamado por la Constitución y las leyes a actuar, únicamente en este marco.

Es esta una afirmación totalmente desafortunada, pese a las posteriores aclaraciones que hizo en el medio citado.

B. Los señalamientos contra el contralor distrital encargado, de quien al igual que a miles de cartageneros, nos preocupa el mecanismo de su elección y las sindicaciones que haceUD.de este funcionario, nombrado por el Concejo distrital tan cuestionado por múltiples situaciones conocidas por nuestra comunidad, son también desafortunados.

Así lo registra el periódico:

…El mandatario siguió profiriendo señalamientos contra Rafael Castillo (contralor), a quien llamó un “sinvergüenza   y bandido”. “Este tipo no estudió derecho, de pronto habrá comprado el título, o si fue a la universidad perdió la plata, expresó” …

Entonces señor alcalde si tiene dudas sobre la idoneidad moral y académica del contralor, espere que los jueces lo condenen, y confirme con las universidades de las cuales él presentó títulos, si los diplomas otorgados son legítimos. Después de esta vital y necesaria diligencia rectifique sus afirmaciones o difunda a los cuatro vientos, lo que ahora afirma con tanta seguridad, pero sin pruebas a la mano.

No exponga su persona a sanciones innecesarias. Los cartageneros lo elegimos para gobernar en pro del bienestar de todos y no para verlo despotricando, rectificando los señalamientos y desafueros cometidos, detenido en un cuartel policial o expuesto a sanciones legales, que bien pueden ser la suspensión de funciones o de otro cualquier tipo.

C. Desafortunadas son también las afirmaciones que hace Ud. a la revista Semana del miércoles 26 de enero 2022(Vicky en Semana):

“Son los órganos de control, los que tienen que defender a Cartagena. Todos los órganos de control y la justicia comen del mismo plato de la corrupción”.

Es temerario hacer estas afirmaciones, aunque es vox populi la presencia del flagelo de la corrupción en estos órganos estatales, todos sabemos: que cada regla tiene su excepción, y hacer estas afirmaciones globales es exponerse a una serie de demandas y sanciones, de parte de quienes se sientan ultrajados.

D. Pero aún más temeraria, son las frases que aparecen en El UNIVERSAL (sábado 22 de enero 2022.P.(24):” Ojalá por ofenderlos hagan su trabajo”: Dau…Si se altera el orden público yo responsabilizo al fiscal general, a la procuradora general y el contralor general, por ser unos alcahuetes. La estrategia de las ofensas, los improperios, los insultos y los señalamientos a priori, no están en el manual de funciones y plan de desarrollo de ningún alcalde del mundo, y continúa siendo una actitud necia suya persistir en este tipo de comportamientos.

E. CULO NO ES UN PALABRA SOEZ.

Contrario a lo que opinan algunos detractores del vocabulario del burgomaestre, la palabra CULO, no es un término soez; aparece en el diccionario de la lengua española, ente que lo define así: “Conjunto de las dos nalgas”; es más: la web “así hablamos.com” escribe que se utiliza para decir que algo es bonito; ejemplo: ¡que culo de carro tienes!

Entonces: ¿dónde está lo soez del vocablo? ¿por qué tanta alharaca?

Sin duda, fue la intencionalidad del alcalde llamar la atención, utilizando una palabra que es considerada vulgar por el común de las personas; y en efecto el mandatario lo logró.

3. LA REACCIÓN DE UN GREMIO Y DE UNA VEEEDURÍA.

Tal, como era de esperarse la reacción de algunos gremios y de algunas veedurías ciudadanas, se dio con prontitud.

Una de las más inmediatas es la del presidente ejecutivo de Anato-capítulo noroccidente- cuya opinión comparto:

“Fue un discurso totalmente desafortunado y fuera de tono; Su forma de expresarse fue grosera y mal educada que no representa a un electorado a una ciudad como Cartagena” …

En verdad, no es esta la primera ni será la última vez que el alcalde de Cartagena utiliza y utilizará un lenguaje inadecuado para denunciar a sus rivales políticos y a los entes estatales destacados por su inoperancia en la defensa de los intereses de las mayorías cartageneras.

De esta manera, la primera autoridad del distrito, en forma frecuente omite el lenguaje de las ciencias políticas, el lenguaje judicial, y cae en el ámbito de los improperios, que a muchos gusta y a otros muchos disgusta.

Así, error tras error, olvida el viejo aforismo: “EQUIVOCARSE ES DE HUMANOS SÓLO LOS NECIOS PERSISTEN EN SUS ERRORES.

La otra reacción inmediata es la de la Red de Veedurías Ciudadanas de Colombia, la cual solicitó la procuraduría general de la Nación una investigación disciplinaria en contra del alcalde Dau.

Conceptúo que es un exabrupto esta solicitud, pues la procuraduría sabe que, ante estas situaciones, tiene la facultad de intervenir de oficio, y la idea no es sancionar al alcalde por usar un vocabulario que no es soez, pero si el más inadecuado para el manejo de estas situaciones.

Por otra parte, los gremios y las veedurías que tienen gran influencia en todos los ámbitos de la ciudad, ¿por qué no realizan campañas anticorrupción y en representación de la ciudadanía exigen mejores resultados a los entes de control y de justicia de la nación y de la ciudad? ¿porque no respaldan de mejor manera la campaña anticorrupción del alcalde?

4. LA GESTIÓN DEL ALCALDE DEBE IR MÁS ALLÁDE LA LUCHA ANTICORRUPCIÓN.

Por lo anterior concluyo que el objetivo de nuestras intervenciones en el desarrollo político de la ciudad debe ser el de apoyar al alcalde en su lucha contra la corrupción, pero exigirle también que utilice los medios y las estrategias jurídicas más adecuados para llegar al fondo de la demostración de la verdad y que atienda la solución de otros graves problemas de los cartageneros como son la pobreza, la exclusión, la movilidad caótica, el desempleo, la inseguridad y el deterioro creciente, rampante del ambiente, el pésimo servicio de la recolección de residuos sólidos de  la empresa Veolia, entre muchos otros

5. A MANERA DE EPÍLOGO: ALCALDE DAU: ERRAR ES DE HUMANOS, SÓLO LOS NECIOS PERSISTEN EN SUS ERRORES Y SÓLO APRECIA AL GOBERNANTE QUIEN LE DICE LA VERDAD.

Alcalde Dau:  Es muy probable que Ud. sea veraz cuando afirma en la revista Semana ya referenciada, que: “todos los fiscales de la sección anticorrupción no sacan un solo caso. Yo pido al menos uno al mes, pero no sacan nada. Nos están mamando gallo (…) Las tres entidades están totalmente politizadas. Solo sancionan a los funcionarios que por cuestiones políticas llegan de Bogotá”.

Pero de verdad, ya es hora que abandone los señalamientos y los improperios y utilice un lenguaje político correcto para referirse a sus contradictores, a quienes llama malandrines y corruptos, y siga gestionando ante los entes que cuestiona, los resultados del trabajo de control y de aplicación de la justicia.

De nuevo le recuerdo el sabio aforismo: “Errar es de humanos, sólo los necios persisten en sus errores”. Tenga también presente que los miles de electores que rechazamos su inválida estrategia para enfrentar a sus rivales fuera de los estrados judiciales, lo hacemos porque confiamos en que ha de mejorar su gestión para el bienestar de las mayorías cartageneras. Recuerde también que sólo aprecian al gobernante aquellos quienes le dicen la verdad y le piden corregir sus continuos errores.

Con los afectos de siempre:

UBALDO JOSÉ ELLES QUINTANA.