Mis Encuentros con Guachi Meléndez: “El Vale” del Joe Arroyo.
(Primera Parte).
En mi extensa existencia de melómano empedernido, las circunstancias de la vida me obligaron a convertirme en un ser fantástico, imaginado y extraordinario:
Nada más y nada menos que en el fabuloso” hombre invisible”, el hombre que millones de seres en la Tierra desearían ser; así por esas cosas de la vida me volví esta clase de humano, siendo yo, y el original los dos únicos ejemplares de terrícolas que existimos en este fragmento del universo, con esta cualidad, con este don.
Hoy, gracias a esta imaginada cualidad, con orgullo de amante apasionado de la música, en mi viejo álbum de recuerdos puedo mostrar mis fotos tomadas en medio de:
Olimpo Cárdenas, con su trío en los años 70, en el antiguo Teatro Colonial de La Quinta, cantando con él, uno de sus famosos boleros: Temeridad:
…Si por temeridad, no quieres volver más
yo mi querer guardado he de callar;
de Richie Ray Y Bobby Cruz en 1991, cuando tocaron en la Plaza de Toros Cartagena de Indias, sus incontables salsas… entre ellas, estos tres petardos:
Sonido bestial,
Agúzate, y
Amparo Arrebato,
De Rafael Ithier, Charlie Aponte y Jerry Rivas, cuando a principios de este siglo con El Gran Combo, en el centro de convenciones, tocaron y canté con ellos durante una larga noche que arrastró gran parte de la madrugada, esta hermosa perla que todos recordamos:
S e están cayendo,
las hojas blancas de mi cabellera…
De Leonardo Fabio y su grupo, cantado a dúo con él :
Hoy, corté una flor,
y llovía y llovía,
esperando a mi amor y llovía y llovía…
De Tito Nieves y Maelo Ruiz, en el Hotel del Prado, en el Carnaval de Barranquilla hará unos cinco años atrás, si mal no recuerdo… y pare de contar.
Mas por increíble que parezca esta historia, ahí en medio de mis preciados tesoros de discos y libros viejos, están las fotos como testimonio documental irrefutable, como irrefutable es también mi presencia invisible en los recuerdos del Gran Guachi Meléndez, en cada una de las fotos de sus presentaciones nacionales e internacionales, acompañándolo en sus fotogramas tomados con:
El Gran Combo en Boca Grande de Cartagena
Tito Nieves,
Gilberto Santa Rosa,
Celia Cruz,
Tito Puente,
Richie Ray y Bobby Cruz,
Rubén Blades y Chelito de Castro,
en cualquier parte del Caribe, USA, o país de Europa, donde estuvo acompañando a su “vale del alma”: el Joe Arroyo y su Orquesta La Verdad.
Esas fotografías que Cronos el dios del tiempo no se atreve a borrar, son los recuerdos imperecederos de las presentaciones del Guachi, alternando con muchos de estos, los más grandes representantes de la salsa del mundo.
Estas, y de manera especial, los vídeos permiten evocar y apreciar la tesitura de su voz, como corista o solista, “el tumbao” alegre de su danzar en escena y la figura inconfundible del maestro de la salsa, del salsero cartagenero, cuyos “pases” rítmicos sirvieron de inspiración a miles de nosotros para demostrar que aquí si se baila sabroso, con esos pases originales que sólo inspira la salsa, aquellos que practicaron “ EL Mata” “ Armando “El Yuca y Bofe” en La Quinta y Las Delicias durante los años 60 y 70 y el Mocha en El Toril en la década de los 90 del siglo pasado.
y por otra para conquistar a una linda mujer con el Baile del Suavecito de Matamoros y Oscar de León,” llevándola para el rincón” con el son de Papaíto y Henry Fiol, y apretándola, cuando creemos que nadie nos ve, aunque medio mundo esté observando.
Fueron aquellas fotos del Guachi y sus videogramas el más reciente encuentro con Víctor “El Guachi” Meléndez, quien heredó de su padre,( antiguo habitante del Barrio “El Boquetillo” adosado a las murallas, hasta culminar la década del 30 del siglo pasado) este sobrenombre sonoro como el instrumento musical que le da su nombre: el guache de nuestra música folclórica.
Sin embargo, mis encuentros más lejanos en el tiempo con este patrimonio vivo de la salsa del mundo datan desde los años 70 , cuando El Guachi fue solista de Los Latin Brothers, la orquesta hermana de Fruko y Sus Tesos, creada por este en 1974, bajo el patrocinio de Toño Fuentes y su hermano Pedro, según cuentan los cronistas de la salsa.
De aquella relación con los Latin, cuenta de manera personal El Guachi, quedaron seis LP. En los cuales alternábamos las voces del coro y la voz líder del solista, el Joe Arroyo, John Jairo Murillo y yo; de ese trio de voces sólo queda la mía, pues todos saben que John Jairo murió aquí en Cartagena, en el 2009 y mi hermano el Joe en el 2011.
Ahí en esos acetatos, quedaron grabadas para la eternidad, dos de mis mejores canciones interpretadas:
“Sueño que no olvidarás”:
En las noches tenebrosas,
Azotadas por el viento,
Estaré en tu pensamiento,
Como un perfume de rosas…
Esta canción, interpretada también por Odilio González, el Jibarito de Lares, la grabé con Los Latin en 1977, en el álbum: Báilame como Quieras, que incluye también mi canción: “Los Criticones”.
La otra mejor canción la interpreté en el álbum: Los Latin Brothers: En Su Salsa (1979).Se trata de:
“No es Negra es morena”…
Una hermosa cumbia del gran compositor Adolfo Pacheco, que nosotros, Los Latin convertimos en salsa de rico sabor con esta bella letra:
Se oyeron gritos de Fiesta,
cuando bailaba Soledad,
con ese son de tambores,
que hizo furor en la ciudad…
Al cantar a capela el Guachi, la cumbia convertida en salsa, de inmediato recordé mis noches bohemias con Andrés Landeros, quien también hizo una gran interpretación en este ritmo, el que mejor sabía hacer Andrés: La Cumbia.
Así, con el paso de los años Joe Arroyo y yo salimos de los Latin Brothers; Joe salió de Fruko Y Sus Tesos y en 1981 creó su propia orquesta: La Verdad, que forma parte de otra historia para contar más adelante. CONTINUARÁ…