A diferencia del género masculino donde existen muchos cantantes que se disputan el trono de reyes de la Salsa, entre las mujeres no hay ninguna objeción cuando se dice que Celia Cruz es la reina indiscutible de este género musical en cuanto a las vocalistas femeninas se refiere. No hay ninguna que se le acerque.
“La Guarachera de Cuba” o “ Reina Rumba” como se le conoció popularmente Celia Cruz es quizá la única cantante que se dio el lujo de “pegar” durante cinco décadas (desde el 50 hasta el 2.000). Se dio a conocer con la Sonora Matancera y después alcanzó una carrera formidable grabando con orquestas de mucho renombre como la de Memo Salamanca (Te solté la rienda); Tito Puente (Sabor gitano); la Fania All Star (Yo sé que Tú); la Sonora Ponceña (Isadora) y Willie Colón (Usted Abusó), entre otras.
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En el ámbito de la salsa hubo otras cantantes que tuvieron algún renombre, pero sus trayectorias fueron, en algunas veces, efímeras, discretas y hasta anónimas.
Cito primero a La Lupe, también conocida como "la Reina del Latin Soul", quien se introdujo en el mundo de la música cantando en distintos locales habaneros y después con la revolución cubana se exilió en Nueva York donde en la década de los 60 tuvo una brillante carrera musical con Mongo Santamaría y Tito Puente.
En Nueva York fue la primera cantante latina que actuó en el Carnegie Hall y el Madison Square Garden, tal y como lo recuerdan muchas publicaciones.
Otra cantante cubana que hizo una carrera aceptable fue Graciela, la hermana del cubano Machito, quien con su orquesta fue uno de los precursores de la salsa en el mundo. Graciela se le recuerda por su popular tema “Hay José” donde hace gala de su gran voz y su sabor para cantar.
Otras cantantes cubanas que tuvieron resonancia fueron: Celina González (Yo soy el punto cubano), quien popularizó al famoso dúo Celina y Reutilio; la India de Oriente, Linda Zeida y Xiomara Alfaro (Tres meses de Vida y Moliendo Café).
Otras cantantes populares fueron la panameña Silvia de Grasse (“Camarones”) y las venezolanas Lila Morillo (Tres meses de Vida) y Tania de Venezuela (Sólo quiero ser), quienes a pesar de que sus producciones no llevan el sello de salsa tradicional, sus temas son colocados en los estaderos como ritmos tropicales.
En Puerto Rico se destaca la figura de Victoria Sanabria, una excelente trovadora de la música popular puertorriqueña, quien aparece en conciertos recientes al lado de cantantes de la talla de Gilberto Santa Rosa, Domingo Quiñones, Luisito Carrión y Andy Montañez.
Hay otra cantante que pegó varios temas en el Caribe Colombiano: Arabella. Desde muy joven escuché que ella había nacido en Cartagena y que se radicó hace mucho tiempo en Venezuela, donde hizo su carrera. Para sorpresa mía, investigando encontré que es bogotana y que ahora está viviendo en Miami. Me la imaginé morenita, pero es “monita”, y la verdad es que su voz tiene sabor a Caribe. Arabella se inmortalizó con los temas “Callesitas de Cartagena”, “Mucho Poquito y Nada”, “El Callejón” y “Mi cuna”, que fueron éxitos en las emisoras locales.
Pasando ya a lo que es la salsa pura, partiendo desde la década del 70, orquestas famosas como las de Richie Ray y Bobby Cruz y la Sonora Ponceña tuvieron cantantes que se lucieron con sus voces.
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Citamos primero a Miki Vimari, quien en su condición de corista con esa orquesta, le dio una identidad a las producciones de Richie Ray. Recordamos los temas “Bomba en Navidad”, Guaguancó Triste, “Sonido Bestial”, “Notin Pena”, “San José”, y “Que se maten tres” entre otros, donde se nota la voz inconfundible de La Vimari. Lástima que ella no pudo consolidarse como cantante porque con la decisión de Ricardo Ray de entregar su vida a Dios, tuvo que salir de la agrupación.
Por su parte, Yolanda Rivera consolidó una brillante carrera con la Sonora Ponceña. Ingresó al grupo de los Lucca en el año de 1974. Allí alternó con los cantantes Miguelito Ortiz, Luigi Texidor, Toñito Ledee, Héctor “Pichie” Pérez Edwin “Canequita” Rosas y Mannys Martínez. Es una gran sonera y a parte de ser vocalista toca muy bien los timbales. Sus éxitos con la Ponceña fueron “Ahora sí”, “Madrugando”, “Canto al Amor”, entre otros.
Aparecieron después en las décadas de los ochenta y noventa otras vocalistas que hicieron una interesante carrera musical como la puertorriqueña La India (con su éxito Vivir lo nuestro con Marc Anthony), la japonesa Nora de la Orquesta La Luz (Salsa caliente de Japón), las dominicanas Sonia Silvestre (Hasta un punto es que se ruega), Milagros Hernández (Como una loba) y Milly (Yo quiero con Hánsel y Raúl) y la colombiana Catalina La O, de Alquimia.
Entre este selecto grupo se destacó más La India, a tal punto que la dieron como la sucesora de Celia Cruz. Sin embargo después de algunos años La India se alejó del ámbito salsero y actualmente se le vinculó en trabajos incursionando al género del reggaeton junto al productor "Dj Memo".
Las mujeres también le han puesto el sabor a la salsa. Sólo esperamos que se animen muchas más para que nos sigan deleitando con sus hermosas voces. Hasta luego.
