En 1973, yo tenía 8 años. Recuerdo que mi mamá, doña Lelys de Armenteros, compró un LP que marcaría mi vida como amante de la música. El LP lleva como título “Solamente, Tania”, del sello “TH”, de Venezuela, el cual todavía conservo como un tesoro musical.
Por aquella época, en Barranquilla, las emisoras de música tropical más escuchadas eran “Radio Olímpica”, “Radio Piloto”, “Radio Tropical”, “Emisora Atlántico” y “Radio Libertad”, que, en su programación diaria, siempre colocaban los temas de Tania.
De ese trabajo, el primero de Tania de Venezuela, producido por Víctor Mendoza, donde aparece ella en la carátula en un supermercado, la primera canción que pegó fue “Si yo pudiera”.
Luego las estaciones promocionaron “Playas de mi tierra”, canción que se convirtió en el primer batazo de la venezolana en Barranquilla. Ese tema tuvo dos versiones, una para Venezuela que decía: “son playas de Margarita, mi tierra linda mi tierra amada” y otra para Colombia: “son playas de Colombia, mi tierra linda mi tierra amada”.
De ese mismo LP sonaron después “Regresa, Corazón” “Si tú me quieres” y “El mar me inspira”, que tuvieron gran acogida entre el público.
Esas melodías impregnadas de cumbia y de sabor a Caribe me cautivaron, al punto que Tania se convirtió en mi artista favorita.
El fallecido locutor de Emisora Atlántico, Jacob Guerra, al ver la belleza de la cantante nacida en Islas Margarita la bautizó “La bonita Tania de Venezuela”.
Después, en sus siguientes producciones, Tania pegó “Enamorada”, “Campesino de mi tierra”, “Pruébalo, mi amor”, “Ola de la mar” “Cumbia guajira”, “Parranda de navidad”, “Por tus recuerdos” (esta última una famosa balada que fue de gran éxito en las estaciones de música de este género y que la versión original fue un bolero de Roberto Ledesma ) y su gran éxito “Solo quiero ser”, que se convirtió en un himno, principalmente en Cartagena.
A pesar de su enorme éxito en Colombia en la década de los setenta, Tania nunca tuvo la oportunidad de cantar en nuestro país. En Venezuela fue una cantante de poca relevancia y no tuvo el reconocimiento musical que merecía por parte de sus compatriotas. Como dice el viejo refrán, “nadie es profeta en su tierra.
Ningún empresario de la época la contrató para que viniera a los Carnavales de Barranquilla, donde su música se escuchaba con gran furor. Sólo venían las orquestas tradicionales de Venezuela como “Los Blanco”, “Los Melódicos”, “Billo’s Caracas Boys”, “Nelson y sus estrellas”, “Orlando y su combo”, Nelson Henríquez y Pastor López, entre otros. Nadie se explica qué pasó.
Años más tarde, en el inicio de la década del ochenta, Tania grabó una producción al lado del connotado artista venezolano Hugo Blanco, quien con su arpa hizo los arreglos y la producción, de donde resultó el éxito “Calla, corazón”.
Quizá ese fue el último tema que se escuchó de ella en la Costa Caribe, porque después, a pesar de haber grabado un LP con el vocalista puertorriqueño Andy Montañez, quien por esa época era el cantante estelar de la Dimensión Latina, tras la salida de Óscar de León, Tania de Venezuela desapareció del mapa musical y todos su fans preguntaban qué había sido de ella. Ese LP con Andy Montañez no tuvo trascendencia en Colombia.
Hubo muchas especulaciones: que se había retirado, que ya no cantaba, etc; y así pasaron los años sin que se supiera nada de esta artista.
En 1997, la Organización Radial Olímpica anunció un concierto en el cual la gran protagonista de la noche fue Tania de Venezuela, por ser la primera vez que visitaba a Colombia.
Con Tania se presentaron también “El almirante del ritmo”, Nelson Pinedo, el único cantante original vivo de la Sonora Matancera; y la bolerista puertorriqueña Carmen Delia Dipiní, quien falleciera un año más tarde (4 de agosto de 1998) después de su visita a La Arenosa.
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Foto tomada en 1997, donde aparecen Tania de Venezuela, izquierda, el autor de este pots y la puertorriqueña Carmen Delia Dipiní (q.e.p.d.).
Una de las experiencias más inolvidables de mi vida fue cuando pude conversar personalmente con Tania. Yo trabajaba en el diario El Heraldo, de Barranquilla.
Al periódico llegaron Tania, Nelson Pinedo y Carmen Delia Dipiní para promocionar el concierto que fue en el Teatro Amira de la Rosa.
Me sentía muy emocionado, y eso lo notó Tania. Me dijo: “¿cómo es posible que a usted tan joven le guste mi música, la cual la grabé hace más de 20 años?” Le respondí que mi mamá compraba todos sus long plays y yo me convertí en su fan número uno. Es más, le cité las 12 canciones de su primer LP; y se quedó, como nosotros decimos popularmente, “con la boca abierta”.
Pero en medio del diálogo, que duró casi media hora, ocurrió un hecho, el cual es el motivo para escribir esta nota:
Resulta que cuando le dije que otro de los temas suyos que están pegados en Barranquilla era “Sólo quiero ser”, mi favorito por cierto, me quedó mirando y preguntó: “¿cómo dice la canción, no la recuerdo?”. Le canté un pedacito, y fue cuando se acordó. Quedé un poco sorprendido, porque me parecía increíble que no se acordara de ese popular tema.
Tania cantó en Barranquilla acompañada de una tremenda orquesta que armó el pianista Hugo Molinares. Su presentación fue impecable. También se sobraron en tarima Nelson Pinedo (“Mompoxina”, “La esquina del movimiento”, “El muñeco de la ciudad”, “Estás delirando”) y Carmen Delia Dipiní (“Delirio”, “Besos de fuego”, “No te demores”, “Dímelo”).
Asistí a ese concierto acompañado de mi esposa Yolanda, a quien le dije: “ya puedo morir en paz, porque había visto cantar a mi cantante favorita”.
Esa noche Tania no cantó “Sólo quiero ser”, porque no tuvo tiempo de montarlo con la agrupación que la acompañó, pero el público salió extasiado con sus temas populares: “Enamorada”, “Campesino de mi tierra”, Pruébalo, mi amor”, “Ola de la Mar”, “Playas de mi tierra”, “Por mis recuerdos”, “Si yo pudiera” y otros más. El presentador fue Jacob Guerra, muy recordado por ser el presentador del programa “Cheverísimo”, del canal regional Telecaribe y quien la bautizó “la bonita Tania de Venezuela”.
Después de esa presentación en Barranquilla, por varios años Tania tuvo la oportunidad de cantar en varias ciudades del interior del país y fue cuando se dio cuenta que era muy querida en nuestro país y que lo que le habían dicho era cierto.
Cuando vine a vivir a Cartagena, hace cuatro años, me encontré que “Sólo quiero ser” es un tema que no falta en los estaderos de salsa de La Heroica, en las emisoras y en los bailes populares.
Cuando comencé a hacer amigos aquí, noté que a muchos le gusta Tania y yo les decía que tuve la oportunidad de conocerla en Barranquilla. Muchos no me creyeron, pero por fortuna conservo la foto que me tomé con ella.
Hace varios días, cuando iba en una buseta de El Socorro, escuché la propaganda donde anunciaban la presencia de Tania de Venezuela al lado de Henry Fiol, Joe Arroyo, Wilson Saoko, Aníbal Velásquez y Alfredo Gutiérrez, en el barrio San Fernando.
Lastimosamente no pude estar en el concierto el pasado sábado, por motivos de trabajo. Varias personas que asistieron me dijeron que Tania se presentó un poco pasada de “traguitos” y tuvo que cantar “Sólo quiero ser”, y otras canciones, con la ayuda de un papel, porque la letra se le había olvidado.
De inmediato me acordé lo que había pasado cuando la entrevisté en Barranquilla. Muchas personas quedaron sorprendidas. Sin embargo, eso suele ocurrirle a muchos artistas.
Resulta que este tema en Venezuela no se escuchó, pero Tania no tenía idea que sí había sido éxito en el Caribe colombiano. Como nunca lo cantó en su país, con el pasar del tiempo las canciones se van olvidando, digo yo acá, haciendo las veces de “abogado del diablo”.
Pienso que los organizadores del concierto debieron informarle a Tania sobre las canciones de ella que se escuchan en Cartagena, porque dicen que cantó algunas que el público no conocía. En Barranquilla, eso sí lo tuvieron en cuenta y por eso su presentación fue inolvidable.
Lo único cierto es que la visita de Tania a Cartagena causó sensación entre los adultos que conocen de su trayectoria musical. Al concierto entró también mucha gente que no la conocía, principalmente la gente joven que está metida en la onda de la champeta y el reggaetón.
He visto muchos blogs de música por Internet donde citan a Tania y la verdad es que sus fans en Latinoamérica son muchos.
Ojalá Dios la guarde por mucho tiempo, pues es una artista que admiro y quiero mucho. Su hermosa voz vive en mi corazón y en la de muchos colombianos. Para mí, ella es única. Es simplemente Tania. Hasta luego.
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Foto inolvidable con la "Bonita Tania de Venezuela" cuando visitó por primera vez a Colombia en 1997.
