Médicos Integrales Comunitarios. Primera Advertencia.


El 14 de julio del presente año, el Colegio Médico Colombiano publica un comunicado abierto a la opinión pública, en el que advierten sobre la potencial llegada de médicos integrales comunitarios (MIC) procedentes de Venezuela a Colombia, calificandolos como una potencial amenaza. Dicho comunicado lanza una dura advertencia: “El peligro a que nos referimos está relacionado al hecho, cierto también, que la formación académica (teórica, práctica y técnica) de los MIC es muy diferente y precaria, dado que sus currículos, lamentablemente, no se compadecen de las altas exigencias formativas y profesionales que requiere un profesional de la Medicina”

¿Qué son y de donde salieron?

Son médicos formados de forma irregular bajo el mandato del extinto Hugo Chavez como estrategia fundamental de su programa de atención “Barrio Adentro”, lo cual no tiene nada de malo en esencia, el problema es el cómo lo hicieron .La Academia Nacional de Medicina de Venezuela en un comunicado emitido en 2016 y  firmado por el entonces presidente Dr. Harry Acquatella, dirigido al Ministerio de Educación Nacional expresan preocupación respecto a este tipo de médicos integrales en varios aspectos de los cuales me permito resaltar citando textualmente: 

  • Se ha aprovechado el perfil del médico como líder social para instaurar un proceso marcado de ideologización en su formación. 
  • Estudian 4 años y no 5.
  • Gradúan al 99% de los matriculados. 
  • Las materias básicas son impartidas bajo la modalidad de vídeos tutoriales elaborados por monitores extranjeros.
  • La carrera de médico integral comunitario se inició de manera improvisada irrespetando la Constitución, Leyes y Normas Universitarias, en Universidades no autorizadas ni preparadas para asumir la responsabilidad de la formación masiva de personal de salud. 
  • Se delegó por completo la responsabilidad de la docencia al personal médico cubano. 
  • Las horas contabilizadas del programa no son ciertas. 
  • El currículum muestra fallas fundamentales tanto en ciencias básicas como clínicas. No hay entrenamiento en laboratorios. 

En esta misma línea el Ministerio de Educación Nacional, en el año 2018 en su documento “Sistemas educativos del mundo, capítulo venezuela” reza lo siguiente:  “el título de Medicina Integral Comunitaria no es equivalente a los programas de Medicina ofrecidos en Colombia.” 

De acuerdo al comunicado del Colegio Médico Colombiano y lo compartido en redes sociales por senadores del pacto histórico, el dia 11 de junio del presente año se llevó a cabo una mesa técnica en el congreso de la república con los Médicos Integrales Comunitarios, el Ministerio de Educación Nacional, el Ministerio Nacional de Salud, la Embajada de Venezuela y las universidades venezolanas, con el objetivo de explorar la llegada de estos médicos a Colombia. 

Así las cosas cabe preguntar: ¿por qué no se invitó a la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas, desconociendo así a los profesionales de la salud en Colombia? ¿Por qué no se hizo partícipe a la Asociación Colombiana de Facultades de Medicina ASCOFAME, dejando de lado la academia y a las escuelas de medicina que forman a los médicos en el país? ¿Por qué no se participó a las asociaciones de usuarios, quienes representan a los pacientes? Pero sobre todo, me pregunto ¿qué mal le hizo este país al actual gobierno, para que busque de forma tan activa destruirlo? No solamente se esfuerza por destruir nuestro sistema de salud sino que ahora amenaza con inundarnos de un tipo de personal sanitario que ni en su país  es considerado confiable. Es que a este gobierno le puede más la ideología que el sentido común. 

Cualquiera diría que es una buena idea, para que el gobierno pueda llevar medicos a los territorios, sin embargo es importante destacar que previamente la asociación colombiana de facultades de Medicina ASCOFAME envió un comunicado donde le aclara al gobierno que disponemos de suficientes facultades para proveer los médicos que nuestro país necesita. 

Apreciado lector, quiero dejarle algunos interrogantes: 

  • ¿Permitiría usted que sus familiares fueran atendidos por un médico que no tiene la formación idónea? 
  • ¿Vió las filas de los subsidios de esta semana? ¿Se imagina cómo será en adelante sacar una cita médica?

 


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