Moisés David Villero la intituló: Colombia bajo el yugo de la plusvalía, haciendo referencia a la explotación del hombre por el hombre dicho por Carlos Marx. Y dice como sigue:
Colombia es un país de economía mixta, donde el estado y las empresas privadas actúan conjuntamente en el mercado, donde se dan altos grados de explotación aberrantes con altos niveles de plusvalía donde este par, gobierno y empresas privadas se ponen de acuerdo para establecer un salario mínimo cada año donde el gobierno complace a los intereses particulares de los grandes dueños de los factores de producción de este país.
Por el otro lado encontramos al proletariado, al colombiano del común que a diario interactúa en el mercado aceptando las imposiciones del gran capitalista y recibiendo solo una pequeña porción del valor de su trabajo (el salario MLV ya establecido por el gobierno)donde las personas que no aceptan las condiciones impuestas se quedan por fuera del sistema y pasan a ser parte de la población inactiva del país ,esta cifra en realidad es muy alta, pero las estadísticas suministradas por nuestro Departamento Administrativo Nacional de Estadística DANE como en el caso de la tasa de desempleo que últimamente se encuentra en un dígito, es una gran falsedad.
Son estrategias del gobierno, de nuestro señor estado que solo le interesa mostrar indicadores positivos maquillando la realidad del desempleo. Inicia aumentando el gasto público en obras civiles(que solo emplea por meses ) llevándose a una gran parte de las personas desocupadas y la otra es abrir la oferta de educación intermedia o técnica para llevar a muchos jóvenes a trabajos duros donde son explotados por el sistema capitalista y este a la vez se nutre, ya que ofrece mucha mano de obra a bajo costo, además el proletariado se limita, dejando al CONOCIMIENTO en manos de pocos, mejor dicho, en las manos capitalistas que solo velan por sus intereses particulares.
Si queremos un país diferente y desarrollado con mejor calidad de vida: no necesitamos una revolución armada, ni socialista. Colombia lo que necesita, es que nos permitan apoderarnos del conocimiento. Es función del estado garantizar el conocimiento como una gestión en su propio desarrollo. El enriquecimiento desmedido de muchas empresas y algunas personas es la prueba reina que genera malestar por la forma tan aberrante como explotan a la clase trabajadora.
El país está en una inequidad social muy alarmante. Hay que cambiar las bases de este sistema para lograr algo mejor, donde las empresas no dejen a un lado la maximización de la producción pero sin explotar al trabajador. Llegó el momento de desprenderse de la codicia, de la ambición por dinero y generar más colombianidad. Mi país es maravilloso, rico en todo.
No da espera que el estado, el gobierno, le importe más el bienestar y la inclusión social de muchas personas que se encuentran en condiciones pésimas de trabajo, baja educación y poco conocimiento donde hay muy mala calidad de vida, que seguir siendo alcahuete de la superestructura en detrimento de los intereses generales de todo un país, como en una ocasión afirmó Carlos Marx.
