El regreso es demasiado corto. Mi compromiso era la quinta parte sobre, " La competencia política desigual 5": La contabilidad de los votos y los muertos siguen votando.
Par nadie es un secreto la alteración que se presentan en los formularios que entrega la registraduría, al momento de contabilizar los votos. Algunos ejemplos. En vez de 8 escriben 18 votos. En vez de 20, colocan 120 votos. En vez de 19 escriben 79 votos. Al momento de los escrutinios salen a la luz esta serie de inconsistencias en los formularios.
Y la otra opción para aumentar los votos en las diferentes puestos de votación, es lograr que algunos que aparecen en las listas de votantes y ya han fallecido, puedan votar sin ningún problema. La prueba biométrica persigue controlar eso. E incluso de personas que hacen su agosto, votando el mismo día más de una vez. Con seguridad deben andar con varias cédulas en el bolsillo.
Tanto las equivocaciones intencionadas en los formularios, como poner a votar a los muertos o votar varias veces con diferentes cédulas, tienen un costo económico bastante alto. Las casas políticas, los mismos candidatos, los mismos líderes son el enjambre para que todo esto se dé. El desembolso en dinero efectivo, constante y sonante, es apreciable. Y seguirá siendo una competencia política desigual aspirar a un cargo de elección popular en Cartagena y Bolívar.
Bueno por motivos de miedo y temor en el ambiente, detuve abruptamente mis artículos. Hoy vuelvo con la misma incertidumbre. Seguiré escribiendo, espero que mis lectores entiendan y trataré de ser lo más objetivo posible. Gracias a todos y todas.