Cada año son capturadas ilegalmente miles de especies marinas como corales, caracoles, estrellas de mar, tortugas y caballitos de mar, para fabricar artesanías y venderlas a la gente que inconscientemente lo compra para usarlos como accesorio o decoración.
En la Avenida San Martín, en el Centro de la Cartagena, en la zona insular, en los sitios turísticos y las playas, existen vendedores que ilegalmente las comercializan, transformadas en anillos, pulseras, collares y artículos de lujo.
Muchas de estas especies están en vías de extinción y cumplen un papel fundamental en el ciclo de vida marina y terrestre: son el alimento de muchas especies y cuando mueren se convierten en el refugio o casa de muchas animales como peces y microorganismos.
Además cada uno cumple una función específica dentro del hábitat marina; por ejemplo las caracuchas, los corales y caracoles se transforman en la arena blanca que vemos en las playas y el fondo del mar. Los corales son también la casa y el alimento de peces, y las tortugas son las encargadas de controlar la sobre población de medusas, su alimento principal y preferido.
Al extraerlos indiscriminadamente, los cazadores furtivos están interrumpiendo un ciclo de vida marina, dejando el mar sin recursos y acabando con uno de los ecosistemas más grandes del mundo e importante.
Al comprar estos artículos tu también estás colaborando con la destrucción y matanza de estos animales o materia biológico, como lo llaman los biólogos y ambientalistas.
Según un informe del Parque Nacional Natural, Corales del Rosario y de San Bernardo, la comercialización de corales, estrellas de mar, conchas y tortugas, se convierte en una amenaza directa que repercute en otras problemáticas relacionadas con la sobre explotación de recursos hidrobiológicos y la pérdida del material de depósito para la formación de playas; las playas del área son de origen arrecifal gracias a los procesos de deterioro y meteorización de los esqueletos calcáreos de las especies que habitan el arrecife de coral.
Si el hombre sigue con la caza y compra de estas especies, dentro de pocos años no habrá playas ni arrecifes de corales. Ya en algunas islas de Cartagena la erosión costera está acabando con predios debido a que no se están formando playas.
Desafortunadamente la comercialización está a la luz pública y las autoridades competentes para sancionar no están haciendo su trabajo, por lo que cada día se ven más vendedores de estas especies.
Otras alternativas
Existen muchos accesorios y artículos elaborados en otros materiales que reemplazan a los comercializados y elaborados con especies marinas. Anillos, cucharas, pulseras, collares, pisa papeles y gafas antes fabricados en Carey (caparazón de la tortuga Carey especie en peligro crítico de extinción) ahora se pueden encontrar fabricados en cacho de vaca y coco.
¿Qué podemos hacer?
NO compres artesanías ni artículos elaborados con especies marinas y terrestres, amenazadas. (Tortugas, peces, corales, estrellas y caballitos de mar)
INFORMALE a tus amigos sobre este tema y no permitas que los compren.
Denuncia a la Policía Ecológica o Metropolitana (112 – 123) y al Establecimiento Público Ambiental -EPA- (664 4296 y 664 4119) los lugares donde se venden estas especies.
EXIGE a las autoridades que implementen la normatividad sobre el tema.
Normatividad ambiental
Ley 1333 de 2009 regula todo el proceso sancionatorio ambiental y le da las directrices a las autoridades para que castiguen a quienes atenten contra los recursos naturales.
También existe el Decreto ley 2811 de 1974 o Código de los recursos nacionales
La resolución 1002 del 25 de noviembre de 1969 prohíbe la captura, extracción y comercialización de todo tipo de corales en las aguas jurisdiccionales colombianas y el Parque Nacional Natural Corales del Rosario y de San Bernardo.
