Características sexuales secundarias
El sexo hormonal da paso a una serie de manifestaciones en el organismo, tanto del hombre como de la mujer, manifestaciones que por la generalidad de su frecuencia son consideradas como elementos diferenciadores esenciales de la sexualidad humana.
Como bien hemos dicho, los órganos genitales del hombre y de la mujer constituyen, de acuerdo con su sexo cromosómico, las características sexuales primarias, pero indudablemente, existen en uno y otro diferencias anatómicas generales que son las características sexuales secundarias.
El esqueleto humano presenta diferencias tan marcadas que se ha podido identificar en estudios arqueológicos, con certeza, el sexo en esqueletos muy antiguos.
Esto también lo emplea la policía actual en estudios de “medicina forense” para esclarecer casos de NN (cadáveres sin identificación) en donde sólo ha quedado el esqueleto o una parte de él. Es decir, por estudios forenses se puede saber si un cadáver corresponde a un hombre o a una mujer. Si a una persona le sacan una gota de sangre podrán saber, por su configuración cromosómica si es un hombre o una mujer, si al hacer la autopsia le escrutan en su interior podrán ver los órganos que corresponden a un hombre o a una mujer, si una persona sufre de cáncer de próstata o de cáncer de ovarios se podrá saber si se trata de un hombre o de una mujer.
La estatura suele ser mayor en el hombre (salvo durante la adolescencia), los huesos son más compactos y sólidos, la pelvis más estrecha, menos ensanchada y existen diferencias considerables en el cráneo y en los maxilares.
Así se pueden ir enumerando diferencias considerables en los músculos, en la configuración de las caderas, en la voz (más grave en el hombre), la distribución de las zonas pilosas (el hombre suele tener más pelo que la mujer en la cara, la mujer simplemente suele tener un ligero bozo sobre el labio superior), las glándulas mamarias, la menstruación en la mujer, etc.
Características sexuales terciarias
Al nacer la persona, el sexo se sigue definiendo cada vez más al ser reforzado externamente por el sexo social e interiorizado en el sexo psicológico. Se estima que a los tres años de edad aproximadamente, el niño o la niña ya tiene plena conciencia de su identidad sexual. Esas diferencias generadas por el sexo social y el sexo psicológico es a lo que se le suele llamar características sexuales terciarias.
Sexo social
Se denomina sexo social a la caracterización cultural que hace la sociedad de lo qué es y lo qué significa, ser hombre y ser mujer. Por ejemplo, a través de la ropa, el peinado, la manera de hablar, los saludos, los gestos, etc. Por tales razones se habla de sexo social: este consiste en aprender y asumir los papeles que la cultura asigna a uno u otro sexo, a uno u otro “modo de ser-en-el-mundo”.
Sexo psicológico
Por la tensión generada entre el desarrollo biológico del individuo (sexo innato) y la interiorización de los valores culturales (sexo adquirido), se va configurando el sexo psicológico (sexo construido).
El sexo psicológico lo constituye, el sentido de ser hombre o mujer, el sentirse macho o hembra del género humano, lo cual implica también una manera de comportarse frente a otros machos o hembras humanos.
En la formación de este “sexo psicológico” indudablemente influyen todos los demás “sexos” mencionados en este estudio.
El sexo psicológico viene a representar por tanto la articulación sistémica entre lo innato (biologia) y lo adquirido (cultura), el cual se configura y expresa bajo la modalidad de una “opción de vida”.
El sexo psicológico puede coincidir o no con los sexos pre-determinados por la naturaleza (Sexo cromosómico, gonádico, gonadofórico, anatómico y hormonal), pero también puede resultar en una “opción de vida” que genere una no identificación y una no concordancia con ellos.
Para los psicólogos este es un escenario en el que abiertamente se manejan dos posturas hasta ahora irreconciliables, la postura que afirma que el sexo viene configurado por la naturaleza y otros que afirman que el sexo es una construcción social, de allí los cada vez más frecuentes choques y discrepancias que se ven reflejados en los llamados grupos conservadores y progresistas.
A los conservadores los suelen asociar con posturas políticas de "ultra derecha" y a los progresistas como posturas de "la extrema izquierda".
¿Qué postura tomar?
Como las posturas progresistas gozan de mayor propaganda en nuestro medio les recomiendo ver este video que les puede ayudar a entender en qué consiste:
- ¿Qué es la diversidad sexual? Explicación fácil: www.youtube.com/watch?v=1QbTZYiQ6BA
La postura conservadora goza de menos divulgación, e incluso se le discrimina en los tradicionales Medios de Comunicación Social, éste video puede ayudarte a entender en qué consiste:
- Ideología de género y adoctrinamiento escolar. Agustin Laje. www.youtube.com/watch?v=8uiqC-HKWqM
La verdad nos hará humanos: libres, conscientes y responsables.
Quienes me conocen saben que no me gusta posar de neutral cuando en realidad nadie lo es, no me da miedo expresar cuál es mi postura y dejo a su consideración la posibilidad de que juzguen mis argumentos, pero espero de ustedes lo mismo, argumentación y respeto en el diálogo.
Me considero un hombre de ciencia e igualmente un hombre de fe (confesionalmente católico), entiendo la verdad como la mejor explicación posible de los datos, lo cual significa que siempre estoy abierto al diálogo y no suelo huir a las confrontaciones argumentativas, pero sin duda ante la irracionalidad siempre escucharán de mí un elocuente silencio.