Una nueva propuesta basada en estudios viejos y uno que otro del año pasado, presentó el Sistema Integral de Gestión Ambiental Distrital (SIGAD), hace un par de semanas, y lo peor es que para ello se requirió la colaboración de un centenar de entidades que realmente no sé qué fue lo que hicieron.
En la exposición que llevó a cabo Carlos Rubio, consultor de la Secretaría Planeación, se recordó que Cartagena es una ciudad costera, que la mayor parte del agua dulce llega del Canal del Dique, que es una ciudad llena de basuras, que la mayor parte de los productos llegan de afuera, que no hay estudios reales de la problemática ambiental en la ciudad y que el año pasado llovió más que otros años.
Fueron dos horas y media que se tomó la Secretaría de Planeación para decirle a los ambientalistas de la ciudad- quienes en su mayoría asistieron, junto a unos cuantos funcionarios y representantes de la comunidad- a la espera de alguna novedad- lo que cualquier ciudadano ya sabe.
Tampoco se vio reflejado en la exposición el esfuerzo de algunas instituciones privadas que trabajan en el tema ambiental y la comunidad pasó a un segundo plano, cuando son ellas las que deberían estar en primera fila y las autoridades policiales tampoco aparecieron en dicho diagnóstico.
Lo realmente nuevo fue que se creará una Secretaría de Hábitat y Ambiente en el Distrito es decir, más entidades y muy seguramente puestos burocráticos, lo digo por las experiencias.
Esta visto que la ciudad no necesita más instituciones ambientales lo que realmente necesita son funcionarios idóneos, autoridades comprometidas con su trabajo y educación ambiental.
Ya está claro que con el EPA no se ha hecho nada, que la ciudad esta cada día peor en materia ambiental, por falta de presupuesto o no, creo que el problema radica en que los funcionarios no están realmente comprometidos con la causa.
¿Cuántos estudios, diagnósticos y proyectos ambientales no se han presentado en esta ciudad, en el mismo salón Vicente Martínez de la Alcaldía? Todos son iguales y ahora que creíamos que iba a ser diferente salen con la repetición de la repetidera; con estudios viejos.
¿Cuánta plata se gastaron y cuánto tiempo, para hacer el tal diagnóstico?. ¿Hay o no plata para hacerlo realidad? De esos no hablaron y cuando se les preguntó no supieron ni que responder.
¿De dónde saldrán los recursos? ¿Quién los aportará? ¿Cuándo se desarrollará este proyecto? ¿Qué pasará con el EPA?
Ya el período de gobernabilidad de la Alcaldesa termina este año y ¿quién garantiza que el que viene si le de continuidad a este proyecto y no se invente otros tantos basados en estudios viejos como ha sucedido en esta Administración? Otra forma de despilfarrar el erario público.
Creo que esta es la ciudad que más estudios ambientales ha hecho, sin llevar a cabo ninguno y si me equivoco por favor corríjanme y díganme cuáles han sido implementados exitosamente y no se han quedado por la mitad.
Una nueva entidad, es la propuesta, pero si el EPA dice que no hace nada porque no tiene presupuesto, ahora imagínense otra institución, más bien porque no se fortalece el EPA y se contratan funcionarios idóneos que trabajen por la causa ambiental.
Cuando realmente se quiere trabajar se trabaja. El problema no es realmente de plata sino de voluntad política. La leyes, los estudios y diagnósticos están, ahí para que se cumplan, lo que falta es meterle el hombro.
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