LOS JAGUEYES O SAN DIEGO: BREVÍSIMAS HISTORIAS SECRETAS DE LA COLONIA.FINAL
LOS JAGUEYES O SAN DIEGO: BREVÍSIMAS HISTORIAS SECRETAS. (FINAL).
A continuación se presenta la parte final de esta crónica, centrada en la vida política y cultural del barrio Los Jagueyes o santo Toribio en la época colonial.
8. LA AZAROSA VIDA POLÍTICA DEL BARRIO DE LOS JAGUEYES O SANTO TORIBIO.
EL Barrio santo Toribio no contó con la sede de instituciones político administrativas de la sociedad civil, como si existieron en el barrio santa Catalina; el dominio político de los militares fue el predominante al contar con cuatro baluartes ,un espolón(La Tenaza) y un cuartel a prueba de bombas para las tropas,(bóvedas) dotado de espacios para almacenamiento de víveres y municiones, acompañado de una cortina de muralla, construcciones que taponaron el boquete que durante casi toda la época colonial estuvo protegido , de manera inexplicable sólo por una estacada.
En el texto: “La Institución militar en Cartagena de Indias 1580-1810” de la autoría del historiador español Juan Marchena, además de presentar una visión parcial del aparato militar en la ciudad, queda documentado que la administración global de los baluartes estuvo a cargo de las compañías de artillería existentes en ese entonces.
En Cartagena se destacarán tres escuelas de ingenieros: la española, italiana y holandesa, con sus aportes apoyados por centenares de artesanos y capataces africanos y afrodescendientes: esclavizados y libres, españoles asalariados y prisioneros condenados a prestar servicios forzados en las fortificaciones.
Más allá de esta caracterización, evaluando de manera global la vida política de esta comunidad, hay que catalogarla como azarosa, al igual que la del resto de la ciudad, pero de manera especial, la de esta, al estar ubicada frente al mar Caribe, el caño del Ahorcado, y el camino de La Cruz Grande, zonas estratégicas en la poliorcética de la ciudad.
De tal suerte, los vecinos de los Jagueyes vivieron los horrores del bombardeo que en 1697 hizo la flota francesa liderada por el barón de Pointís y en 1741, la flota inglesa bajo el mando del general sir Eduard Vernon.
El episodio vivido con los ataques de los ingleses, está ligado a las creencias religiosas de los cartageneros y se convirtió en una tarjeta postal para promocionar, en tiempos actuales a la iglesia santo Toribio; el autor deja a la discreción del centro virtual Cervantes, la narración del hecho:
“En el templo se encuentra también una pieza curiosa conservada en una urna cubierta con vidrio. Se trata de la bala que fue lanzada durante el ataque del almirante Vernon al interior del templo cuando se celebraba la misa el 27 de abril de 1741, día de santo Toribio Alonso de Mogrovejo.
La bala cayó en medio de los feligreses, sin causar heridos ni daños, lo que se considera por los creyentes como un acto divino. Por ello la bala se conserva como memoria de la misericordia de Dios”. (cvc.cervantes.es/iglesiasantotoribio. Consultado julio 10.2023).
Ya a manera de epilogo sobre este tópico es posible afirmar, que la pertenencia a las tropas de las guarnición de Cartagena, se constituyó en un factor de movilidad social de las castas: negros, mulatos, zambos, pardos y demás cruces raciales existentes, quienes accedieron a mejores condiciones de vida, y consideración social comparados con otros sectores de su clase social de oprimidos; sin embargo, muy contados casos, casi ninguno, tuvieron acceso a las élites de españoles y criollos.
9. VIDA CULTURAL DE LOS JAGUEYES O SANTO TORIBIO: EL CULTO CATÓLICO VS. LOS CULTOS DE LOS AFRICANOS Y AFRODESCENDIENTES.EL CESSATIO A DIVINIS.
9.1. El proceso de aculturación.
En diversas crónicas presentadas en este blog se ha escrito sobre la imposición violenta que hizo la iglesia católica a los africanos y afrodescendientes, despojándolos de sus creencias ancestrales, sus rituales y demás factores estructurales de su cosmogonía y religiosidad, acciones que en otras palabras equivalen al proceso de aculturación que los ibéricos impusieron ,primero a los amerindios originarios y después a los africanos y afrodescendientes esclavizados y libres de Nuestra América.
Los habitantes del barrio Los Jagueyes no escaparon a estas forzadas circunstancias y los originarios, africanos y sus posteriores generaciones afrontaron las diversas acciones de la evangelización cristiana, a la cual muchos se acogieron para salvar sus vidas; otros las aceptaron de manera pública, aunque en el fondo de su mente, su alma y sus prácticas ocultas siempre estuvo presente la cultura religiosa ancestral(sincretismo) y miles de ellos, también, se asociaron en los cabildos de “nación o cabildos de negros “como muestra de un largo y exitoso proceso de resistencia cultural y de africanía, como lo escriben algunos autores.
9 .2. Los cabildos de negros.
Con la permisividad de los amos, esclavizados y libres formaron los cabildos negros que para los gobernantes representaban espacios de socialización y aculturación, evitando con ello el descontento y la rebeldía; para los negros eran organizaciones culturales, donde además de conocer los mecanismos de dominación cultural podían conversar y reproducir su propia cultura. (Díaz Rosa. Obra citada).
9.3. Los cabildos de las calles de Los Jagueyes.
Permitan que sea el escritor Edgard Gutiérrez(qepd) en su ensayo “Los cabildos de negros en Cartagena de Indias”, quien explique sobre la existencia y las prácticas culturales de estas organizaciones:
“Los cabildos de nación existieron en Cartagena desde el siglo XVII y fueron incluidos particularmente en las fiestas de la virgen de La Candelaria. Son reveladores los testimonios de Francisco Joseph de la casta arará, con referencia a los entierros, los signos fragmentarios del tambor y los cantos, los lloros y otras compañías. Niña de Friedman se refiere a ellos (los cabildos) con la siguiente observación: La información histórica muestra como los cabildos de negros que fueron en un primer momento enfermerías en Cartagena se convirtieron en ámbitos de resistencia a la sociedad dominante y en refugios de africanía”.
“Carmen Borrego Pla documenta que en 1693 existían los cabildos de Arará y Mina, mientras que en el padrón de 1777 se registran cabildos de negros en el barrio santo Toribio(Hoy san Diego): negros carabalíes(en las calles del Cabo y Los Siete Infantes), negros luangos (en la calle Quero ),negros araráes y jojóes (en la calle san Pedro Mártir),negros minas (en la calle del Santísimo) y negros lucumíes y chaláes (en la calle de los Siete Infantes)”.
“Ante la hegemonía del mundo cristiano -católico, las prácticas religiosas, fueron, durante aquella época muy importantes como recurso de resistencia cultural…Los cabildos en su condición de imaginarios (representaciones culturales)fueron, tal vez, los espacios compensatorios del vacío religioso en que quedaron” …los africanos esclavizados…
Ante la pujanza de los cabildos, estos fueron sometidos a restricciones por el gobierno colonial. “Por ello, las autoridades legislaron e impusieron prohibiciones mediante las llamadas ordenanzas donde se designaban los días y sitios de celebración, así como se otorgaban las licencias para sus cantos y bailes acompañados de tambores”.(Gutiérrez).
“Por tales restricciones quienes organizaban los cabildos de negros hicieron que sus actividades fueran más vistosas en los momentos que si les eran permitidas, especialmente durante las fiestas de La Candelaria y el carnaval de semana santa, oportunidades para lucir las costumbres y vestidos de su patria”.(Gutiérrez)
Gutiérrez concluye afirmando que los cabildos de negros de Cartagena de Indias constituyeron no sólo una forma de resistencia cultural, sino también uno¿ -s espacios compensatorios del mundo religioso, de sus tradiciones, danzas, ceremonias y sabiduría ancestral. Bajo la figura de cabildos de negros, estos persistieron hasta mediados y finales del siglo XIX, siendo muy representativos con sus imaginarios culturales en las fiestas de la virgen de La Candelaria y en los carnavales” …antes de la cuaresma católica.
A -principios del siglo XX los cabildos van perdiendo su significación organizativa y cultural hasta el punto que muchos desaparecen y otros quedan reducidos a una mínima danza festiva, de acuerdo con las investigaciones del autor citado.
9.4. El Cessatio a Divinis: Frailes franciscanos vs. Monjas clarisas.
El Cessatio a Divinis o suspensión de todos los oficios religiosos, incluida la eucaristía o misa de los católicos, fue un largo conflicto que enfrentó a dos organizaciones cristianas durante los años 1682-1702, como fueron las monjas clarisas del convento santa Clara y los franciscanos del convento san Diego.
Por la calidad de sus protagonistas, por el número de estos: comunidad de católicos, obispos de Cartagena y santa Marta, gobernador de Cartagena, monjas y monjes e inquisidores, el Cessatio a Divinis se convirtió en uno de los episodios más escandalosos y aberrantes de la historia de la religión católica durante la época colonial.
El ensayo, del autor de estas líneas, “Historias secretas”, en próximas páginas: explica con detalles el suceso de la referencia, en la entrega de la fecha 07.11.2022 del universal.com.co, (Historias secretas de la plaza de san Diego 3) a la cual remitimos a nuestros lectores y lectoras.
PD.Imágen tomada de eluniversal.com.co
Con los afectos de siempre:
UBALDO JOSÉ ELLES QUINTANA.
Patrimonialista. Ambientalista.